"No sé cuál será mi límite", expresó el delantero de 22 años, quien afirmó que el desempeño logrado hoy superó sus mejores expectativas.
"Se me ponen los pelos de punta. Es una gran emoción, una felicidad inmensa realizar este sueño. Yo no me lo imaginaba ni siquiera en mis mejores sueños con la selección. Me siento muy feliz y se lo agradezco a Dios", afirmó.El atacante del Barcelona elogió además al seleccionador Carlos Dunga: "Él nos dijo que la mejor forma de demostrar respeto hacia el adversario es hacer todo para derrotarlo. Y nosotros lo hicimos".
"Yo busqué marcar los goles, pero no por mi éxito individual, sino para ayudar a mis compañeros y a la selección brasileña", agregó.