Daniela es una mujer joven y luchadora con un duro pasado y un futuro más incierto que el de la mayoría, por eso sabe que cada amanecer es un regalo y afronta la vida con una enorme sonrisa. Rubén Ramos “el toro español” es un futbolista de fama mundial que juega en el Inter de Milán, rico, guapísimo y enamorado de las mujeres “técnicamente perfectas”. Cuando Rubén se lesiona durante un partido, deberá ponerse en manos de Daniela, reputada fisioterapeuta, y sus caracteres no harán más que chocar, aunque ella siempre responderá a sus ataques con ironía y su perenne sonrisa. ¿Descubrirá Rubén que es lo que ella esconde? ¿Será capaz Daniela de superar las barreras que ella misma ha levantado contra un hombre que no es, para nada, lo que ella necesita?
Este es el primer libro que leo de Megan. Sí, lo sé, podéis matarme ya. La verdad es que al principio no sabía muy bien qué pensar. El fútbol y yo no nos llevamos demasiado bien y el hecho de que el protagonista masculino sea una especie de Cristiano Ronaldo...Sin embargo, la historia me ha sorprendido bastante y ha conseguido engancharme. Megan Maxwell tiene una forma de narrar que hace que sus historias sean divertidas, por lo que he podido comprobar con este libro, aunque he de confesar que el Yupi, yupi...hey ha acabado poniéndome de los nervios. Ese sería el único detalle a objetar.
Me gusta que la protagonista no sea perfecta, eso lo hace más real. Estoy cansada ya de las historias cuyas protagonistas parecen salir directamente del catálogo de Victoria Secret. A mi manera de ver, ese es uno de los puntos fuertes que tiene esta historia. ¿Y qué decir del final? Me parece absolutamente adorable. Y tranquilo, no diré nada más al respecto.
—Vamos a ver cómo te explico esto sin que parezca que exijo ser tu novia, ni ninguna de esas tonterías me creas o no, no es eso lo que pretendo. El tema es que si sales conmigo a cenar, estás conmigo, no tonteando con otras mujeres delante de mis narices, porque si haces eso, yo tengo dos opciones: mirarte como una tonta o divertirme y pasar de ti. En este caso, me he decidido por la segunda opción.
Como podéis ver en este fragmento, los piques y la tensión sexual están más que garantizados, y eso es algo que me encanta. Hace que la lectura sea todavía más entretenida. Los personajes evolucionan de manera pausada, sin sobresaltos ni giros que no tienen ni pie ni cabeza, son fieles a su forma de ser. En más de un sentido. Aunque, en algunas ocasiones, pecan de cabezotas, sobre todo la protagonista femenina. Los secundarios pasan sin pena ni gloria, no porque no sean importante para la trama, que lo son, sino porque todo gira entorno a los protagonistas, ellos son los importantes. Sin embargo, esto cambia cuando se trata de Sushaila e Israel, pues ellos serán los que nos muestren una cara del protagonista que no nos habríamos imaginado.
En definitiva, si sois unos apasionados del chick-lit, esta novela no os dejara indiferentes. Yo os recomendaría que la leyerais, puesto que es un libro imprescindible para los amantes de este género.