“Nightcrawler”: El tiburón solitario

Publicado el 17 febrero 2015 por La Mirada De Ulises

[8/10]   Reina la oscuridad en la ciudad de Los Ángeles, pero un foco de luz nos dice que no todo el mundo duerme. Es la cámara de Louis Bloom, un joven convertido en nightcrawler (merodeador nocturno) que recorre las calles en busca de la noticia más sensacionalista y escabrosa que pueda encontrar. Le interesa la sangre del delito urbano que pueda vender en una exclusiva televisiva que aporte audiencia, y para eso necesita llegar antes que la policía y la competencia al lugar del suceso. Interceptando emisoras de la policía, ayudado por un pobre becario que no tiene dónde caerse muerto, Louis aspira a llegar a cotas más altas… porque es un profesional. Sin miedos ni complejos, sin más normas que las que él se pone, sin reparos ni frenos a su actividad, quiere convertirse en el rey de la noche y en el dueño de su destino. Ese el sombrío y turbio ambiente que Dan Gilroy recrea en “Nightcrawler”, en una mirada a la ética de la información y en otra a la soledad de un individuo sin escrúpulos y de una audiencia adormecida y ávida de morbo.

La película de Gilroy podemos verla como los trabajos que un reportero que trata de hacerse un hueco en el mundo laboral. Pero también podemos contemplarla como la tragedia de un hombre solitario que cabalga por la carretera en su flamante coche rojo (nos acordamos de “Taxi Driver”), o como la de un outsider que aparenta una formación humanan y empresarial -autodidacta, por internet nos dirá-, o como la de un fracasado que exige sexo porque no tiene corazón para querer. Todo eso es Louis, personaje que juega sus bazas porque siente que, de otra forma, no tiene lugar en esa jungla de asfalto donde se le niega el trabajo. Por eso, ¿es Louis fruto de una sociedad individualista, injusta e insolidaria? En adelante, él pondrá las normas de la negociación, y los demás -Nina la jefa del programa, su ayudante Rick o la misma policía- tendrán que plegarse a sus exigencias, mientras nuevos becarios no dudan en seguir sus pasos… en un final tan dramático como antológico.

La fotografía de Robert Elswit transmite esa atmósfera opresiva y amoral, carente de sentimiento y humanidad, mientras que el montaje ayuda a que la historia avance a buen ritmo y sin perderse por carreteras secundarias. Por su parte, en una magnífica interpretación, Jake Gyllenhaal acapara todos los planos de la cinta, y su fría mirada entre cínica e inteligente hace que el espectador permanezca distante porque es un tipo peligroso que te la puede clavar por la espalda. En ese sentido, su cámara es el arma del siglo XXI y así se muestra en la escena final al enfrentarse al policía que le encañona: ¿quién ganará el pulso, la ley o la opinión pública? El derecho a la información choca así con el respeto a la dignidad de la persona y más aún con el propio vivir. Resulta estremecedor el comportamiento de Louis en algunos pasajes… en una actitud extrema de quien considera profesional grabar el desangre de una víctima.

En cualquier caso, Loius es un tiburón hambriento de sangre, un cazador de noticias a cualquier precio, un francotirador solitario que siempre utilizará a los demás, un vampiro cuya cámara quitará vida a quien se ponga por delante. Radiografía de una profesión desvirtuada o metáfora de la sociedad enferma, “Nightcrawler” nos llega como una de esas películas fáciles de ver pero de gran complejidad y retorcimiento, como un ejercicio cinematográfico que sabe contar una historia y elevarse por encima de lo narrado. Thriller oscuro, cine negro, crítica social, parodia y sátira a un mismo tiempo… es una propuesta interesante sobre un tiburón que decidió ser el más salvaje y cínico de los animales urbanos.

Calificación: 8/10

En las imágenes: Fotogramas de “Nightcrawler”, película distribuida en España por Filmax © 2014 Bold Films. Todos los derechos reservados.

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Publicado el 17 febrero, 2015 | Categoría: 8/10, Año 2015, Críticas, Hollywood, Thriller

Etiquetas: Dan Gilroy, ética, Jake Gyllenhaal, Nightcrawler, periodismo, Robert Elswit