Parecía que Nike estaba dormida en los laureles. Su Grip 3 desde hace muchos años era un guante fiable, con un corte reconocible, simplemente cambiaba de colorway y 2 cosas puntuales…y otra temporada más a sus espaldas. Mientras, Adidas, su gran rival, daba grandes saltos cualitativos y apostaba firmemente por los guantes de portero hasta hoy con sus Predator actuales. Pero Nike nos ha descubierto el por qué llevaba tanto tiempo sin traer nada nuevo…y vaya si lo ha traído…
Nike Mercurial Touch se llama la que está llamada a ser la GRAN revolución en los guantes de portero. Al igual que hizo ya la marca americana con el conocido Dynamic Fit en aquellas Magista revolucionarias (el calcetín, para que nos entendamos) en este caso apuestan de lleno a un nuevo concepto de guantes que verán la luz en Mayo de este año 2018.
A grandes rasgos y a falta de datos más concretos, la apariencia es de un ajuste máximo, tremendo. Una libertad total y absoluta en la mano sin ningún tipo de armado. Puede ser algo increíble para muchos o algo odioso para otros, pero hasta probarlos…no lo sabremos. Lo que es evidente es que la muñequera tiene algo muy significativo. Y es que no tiene ningún tipo de cierre. Un elástico de gran longitud es el encargado de ajustar la mano al guante y que no se mueva.
Pero el concepto de este Mercurial Touch va más allá. Es extremadamente fino (casi la mitad que un guante convencional) y pesa un 40% menos. Y eso implica que la mano sea más libre, y que por tanto tenga más posibilidades de moverse más rápido a la caza de la pelota. ¿Como se consigue? Con sólo 2 piezas. La palma por un lado y el dorso por el otro. Ni más ni menos.
También cabe destacar según las imágenes que circulan por redes, que la palma es “Long Palm“, es decir, que llega hasta el final de la muñeca, que el guante tiene aplicada la tecnología ACC (All Conditions Control) que se aplica a las botas, y que el dorso tiene unos añadidos de grip en los dedos anular y medio para el despeje de puños.
La duda estará en si los porteros, recelosos de una revolución tan grande, serán capaces de dar el paso a cambiar a este concepto de guante. ¿Tenemos el futuro en nuestras manos? Nunca mejor dicho, pero veremos en Mayo si es verdad.