No desprecies una buena newsletter

Publicado el 11 agosto 2014 por Lorena White @lorenagwhite

(Un poco más tarde de lo que acostumbro. Ya sabéis, eso de tener vacaciones, aunque no implique un viaje, invita a perderse un poquito del mundo igual :)

¿Escribes un blog? ¿Tienes una pequeña empresa? ¿Te dedicas a publicar contenido en Internet? ¿Y cómo lo compartes? ¿Cómo estás en contacto directo con gente que, voluntariamente, ha accedido a recibir tus novedades? Efectivamente, a través de las redes sociales se consigue tráfico y comunicación con los lectores habituales de un blog. Sin embargo, hay algo un poco más antiguo que, a pesar del boom de Twitter, Facebook y otras, ha logrado mantenerse y sigue siendo utilizada por multitud de particulares y empresas: la newsletter.

Como seguro que sabes, la newsletter es una publicación de carácter informativo, que se distribuye periódicamente a una lista de suscriptores que, previamente, te han autorizado a que les mandes tus noticias a su correo. Por el simple hecho de haber tenido ese gesto, aquí tienes algo que la newsletter tiene y que no está en las redes sociales: la complicidad y la confianza que deposita un lector cuando da su dirección de correo.

Y es a través de la newsletter existe la posibilidad de que aquello que quieres compartir, tu contenido, tus últimas novedades, llegue de manera directa a la bandeja de entrada de tus suscriptores. Y partiendo de esta premisa, ¿por qué no hacer un buen uso de ella?

Yo lo veo de una manera muy simple. Las redes sociales atraen al público de tu comunidad y es cuestión de tiempo e interacción fidelizarlo; la newsletter, si ofrece calidad y cierta exclusividad, puede enamorar al público. Juntas, redes y newsletter, pueden formar parte de una misma estrategia encaminada al éxito de tu blog / proyecto /negocio.

Hoy os traigo algunos trucos para hacer llegar una buena newsletter a vuestros lectores. Podéis completar esta información con la Mini Guía de Mailchimp que os dejé hace unas semanas por aquí.

1. Respeta la periodicidad y no bombardees con e-mails: lo poco gusta, pero lo mucho cansa. Si las condiciones que has puesto para que la gente se suscriba a tu newsletter es que les llegará de forma mensual o de forma quincenal, respeta que así sea. No mandes e-mails extraordinarios a no ser que sea por algo realmente importante. Si puede esperar, mejor incluirlo en el siguiente envío que más mails de la cuenta porque, si la audiencia se satura, puede solicitar no seguir recibiendo tus noticias.

2. Comparte el contenido más interesante: no hace falta que en una newsletter compartas todo el contenido completo que has subido en el último periodo a tu blog. Intenta hacer una selección de los contenidos más importantes y, una vez que el usuario haga clic y llegue a tu blog, ya decidirá si quiere seguir cotilleando las entradas. Lo importante no es que salga una newsletter con mucho contenido, sino con contenido de calidad. También puedes añadir artículos de otros blogs y páginas que creas que pueden ser interesantes para tu audiencia. Este contenido le aportará valor a la newsletter y tus lectores apreciarán que no solo te preocupes por el tráfico propio, sino porque accedan a otras fuentes sobre temas que les interesen.

3. No seas un robot: para hacer un feed con titulares y fragmentos de los posts de tu blog, ya tenemos herramientas automáticas como Feedburner. Una newsletter es mucho más personal que eso y, por ello, tienes que aprovechar la oportunidad de poder llegar directamente a la bandeja de entrada de tu lector, utilizando un lenguaje personal, en el que escribas como si estuvieras hablando directamente con él y en el que hagas un resumen de tus entradas con personalidad, cuentes cosas, etc.

4. Utiliza títulos llamativos y un diseño que entre por los ojos: a todo el mundo le gusta que lleguen cosas bonitas a su correo. Utiliza un diseño para tu newsletter que sea sencillo, pero que enamore nada más verlo y unos textos que no aburran al personal. Consigue llamar la atención total del lector con títulos llamativos.

5. Haz que tus suscriptores se sientan especiales: ofrece ventajas y cierto trato de favor a aquellos que han decidido suscribirse a tus noticias. Elabora contenido que sólo puedan recibir ellos, algún archivo descargable como calendarios, fondos de pantalla o e-books. Échale imaginación y dota el hecho de estar suscrito de cierta exclusividad.

6. Dedícale tiempo: no mandes una newsletter sólo por enviarla. Dedica tiempo a su elaboración, pero también a optimizarla para que sea más atractiva y dinámica y a observar los resultados que obtienes después de mandarla. Con esto no sólo me refiero a las estadísticas, sino a las opiniones de aquellos que la reciben (en el caso de que no te lleguen de manera espontánea, ¿por qué no preguntar qué les ha parecido?)

Como ves, esto de elaborar y enviar una newsletter puede llegar a ser un arte. Pero todo empieza por ir practicando, ¿te animas? ¿Crees que realmente podría ayudarte en la relación/captación de tus usuarios?

Feliz semana :)