No es mío, de Susi Fox

Publicado el 04 febrero 2019 por Rustisymustis @rustismustis
No es míoAutora: Susi Fox
Traductora: María del Mar López Gil
Editorial: Suma de letrasISBN: 9788491292357
Páginas: 392
Un adictivo thriller sobre el amor, la traición y la desesperada búsqueda de una madre por descubrir la verdad... antes de que sea demasiado tarde.Te despiertas tras una cesárea de urgencia, desesperada por ver a tu hijo. Pero cuando te lo enseñan, simplemente lo sabes...
Ese bebé no es tuyo.
Nadie te cree.
Ni los enfermeros ni tu padre ni tu marido.
Dicen que estás confusa, que deliras.
Que resultas peligrosa.

Pero eres médica. Y sabes lo fácil que es cometer errores.
¿Confías en tu instinto?
Porque hay una cosa que tienes clara por encima de todo.
Debes encontrar a tu bebé.(Sinopsis de la editorial)
Cuando leí la sinopsis de No es mío, pensé que era la novela que podría engancharme en un período de una cierta crisis lectora. Una mujer que acaba de ser madre y que dice que el bebé que le presentan como suyo no lo es... Vamos, que tenía todas las papeletas para ser una lectura ágil y muy entretenida.
No es mío empieza muy bien. La protagonista, Sasha, nos cuenta en primera persona la pesadilla que está viviendo. Ha tenido a su bebé mediante una cesárea de urgencia, pero la que creía que sería una niña es ahora un niño que ella insiste en que no es el suyo. Intercalados con los capítulos en los que nos habla Sasha, están los de su marido Mark, con lo que tenemos dos puntos de vista de lo que está sucediendo.
La novela pretende transmitirnos la angustia de Sasha por demostrar que ese bebé que está en la incubadora no es el suyo, y a veces llegamos a pensar que está sufriendo algún tipo de psicosis postparto y que no puede admitir la realidad. He de decir que al principio sí que sentí esa angustia, pero a medida que el libro avanza se convierte en una sucesión de idas y venidas de Sasha desde el pabellón psiquiátrico en el que está ingresada hasta el lugar donde se encuentra su hijo Toby, y todo comenzó a hacérseme muy repetitivo. Tal vez esto es así porque la autora quería que sintiésemos esa angustia, pero a mí me produjo el efecto contrario: cada vez iba perdiendo más el interés.

Susi Fox


También en un principio me gustaba lo que los capítulos que narra Mark aportaban a la historia. El marido de Sasha iba desgranando aspectos de su vida anterior como pareja, e incluso de su infancia. Sin embargo, cuando todo va encajando me pareció que estos datos no aportaban demasiado a la resolución de la historia, y que estaban metidos un poco a calzador para añadir más detalles escabrosos, sin más.
A pesar de que me acabé el libro no puedo decir que haya sido una lectura especialmente adictiva, porque a mí, como ya he dicho antes, se me iba haciendo cada vez más tediosa. Sin embargo, necesitaba saber cuál iba a ser el final. Y éste fue lo que menos me convenció de todo: es cierto que un final impactante es lo que esperas muchas veces en un thriller, pero cuando el impacto es tan exagerado como en No es mío, lo que se consigue es que no sea creíble (o al menos para mí dista mucho de serlo).
En resumen, No es mío es una novela de lectura fácil, que promete mucho más de lo que da y que creo que se olvida igual de rápido que se lee.