Acaban de tener un hijo y la cara del padre al preguntarle qué tal todo es un poema…Parece que ha sobrevenido una desgracia. Cuenta que la madre tiene depresión post-parto, pero lo peor es que él no parece estar mucho mejor. “Es que nos damos cuenta de lo mucho que nos ha cambiado la vida. El niño no ha sido muy buscado, así que entre eso y el la situación…”No me puedo creer lo que estoy oyendo.En ningún sitio está escrito que haya que traer hijos al mundo. Si no se siente esa necesidad, si no hay un deseo, ¿por qué lanzarse a ello?Por supuesto con las premisas de esta pareja, el inicio difícilmente iba a ser fácil. Y es que los primeros días son casi siempre “duros”, así que lo serán mucho más si el bebé no era realmente deseado. Yo creo que es pronto para hablar de depresión post-parto, porque el bebé tiene a penas 10 días, y ya sabemos como son esos primeros momentos: postparto, cansancio, sueño, tomas muy frecuentes, un bebé por primera vez a nuestro cuidado…El que no se haya sentido abrumado, vamos, es un caso raro. Así que quizá lo que le pasa a la mamá no es depresión y entra dentro de lo normal. Yo también recuerdo haber dicho los primeros días de vida de mi primer hijo cosas como "yo antes tenía una vida, y ahora todo es teta-pañal-teta; me voy a morir literlamente de sueño"Si es cierto que la madre tiene depresión, van por mal camino. Porque el padre no va irradiando felicidad precisamente, y además en lugar de quedarse junto a la mamá para ayudarla, enseguida ha vuelto al trabajo. ¿Tiene tantas obligaciones?¿O es que prefiere no estar en casa?Supongo (y espero) que la situación evolucionará a mejor, que iran poco a poco conociendo a su pequeño y queriéndole y disfrutando cada vez más de él.Pero lo cierto es que nunca había visto a unos padres tan desanimados y desmotivados. Y entonces me queda la duda de si realmente no quieren esto para ellos. Y por qué han dado el paso.