(Impromptus del ay, ay, ay: sin señalar...)
Hay fetichismos implícitos que calcinan la memoria sombras simiescas que cruzan delante de los espejos la vieja melancolía y la puta mansedumbre el olor de los pesebres la raíz del cardamomo
Hay letreros ilegibles que nos retratan al paso cada palabra ignorada es un reloj sin agujas olvidados los plumieres la vida es sólo descartes no quedan en la baraja figuras que nos consuelen
Hay carteles drogadictos que nos hacen prisioneros y nos ponen al cuidado del guardián más abyecto es una vieja leyenda que termina donde inicia su lento manto de nieve cada día la memoria Fotografía: Cielo enrejado con ave indecisa. © AJR, Gredos, 2016