-La forma y las atmósferas por encima de la trama.-
Lo que nos cuenta. Un hombre maduro y veterano de guerra, Llewelyn Moss, descubre en el desierto tejano durante una salida de caza los restos de un tiroteo entre narcotraficantes que deja muchos cadáveres, una buena cantidad de droga y más de dos millones de dólares en efectivo. Cuando se apropia del dinero, Llewelyn pasará a ser buscado por la ley y por los individuos que contratan los delincuentes para que averigüen qué sucedió y dónde está lo que es suyo.
Mi opinión. Novela que si bien se mantiene dentro de marcos noir ya conocidos lo hace con una forma de narrar llamativa, con momentos filosóficos (que generan sensaciones encontradas) por parte de uno de los personajes que van interrumpiendo la acción, de ritmo contenido, bastante rápida de leer, llena de poesía oscura, con una atmósfera densa y palpable, de personajes que representan ideas y factores de la trama pero que son muy humanos y comprensibles, narrada a ráfagas (marca del autor), entretenida pero no redonda y que atrae pero no termina de atrapar.
Destacado. Anton Chigurh. Repulsivo y fascinante.
Potenciales Evocados. Más parecida a “Meridiano de sangre” que a “La carretera” en cuanto al estilo, pero que podría ser una historia de Ed McBain o Donald Westlake en cuanto a la trama.