Así lo escribe la Academia de conformidad con Cervántes en dos pasajes del Quijote. Pero el mismo Cervántes en un pasaje de La señora Cornelia y en otro del Casamiento engañoso dice:
-No es oro todo lo que reluce.En la Colección de Zaragoza se lee:
-No es oro lo que reluce, ni harina todo lo que blanquea.Este refrán, otra de las más importantes reglas de acertada observación, nos aconseja abrir mucho ojo y no dejarnos fascinar por las vanas apariencias.
A la misma familia pertenecen los que siguen:
-So la buena razón empece el engañador.-So la buena razón yace el engaño.
-So lo pardo está el engaño.
-So la color está el engaño.
-So vaina de oro, cuchillo de plomo.
-So cabello rubio, buen piojo rabudo.
-No son todos los hombres los que mean en pared.