No hace falta complicarlo todo. La hoja del níspero es verde, y está húmeda porque ha llovido algo, o por el rocío de esta mañana de abril. Pero la hoja también es naturaleza, y vida, y muerte, y alimento.
El sexo solo es sexo. Pero, a veces, también es el hogar, el amor, la familia. La conexión de dos seres que conectan infinitas realidades de sus cuerpos y sus mentes, y quizá, luego, de otros cuerpos y de otras mentes, y de otras realidades.
El café solo es café hasta una fría mañana de invierno, y el perro solo es compañía hasta el cruce de miradas, el lenguaje del alma, el caminar cerca y hacerse cómplices.
No hace falta complicarlo todo. El mundo son las pequeñas cosas, y ¿qué son las pequeñas cosas si no infinitas realidades?