Luego nos sentimos frustrados porque nuestros hijos no son lo suficientemente grandes y pensamos que seremos más Felices cuando crezcan y dejan de ser niños, después nos desesperamos porque son adolescente, difíciles de tratar.
Pensamos: seremos más felices cuando salgan de esa etapa. Luego decidimos que nuestra vida será completa cuando nuestro esposo o esposa le vaya mejor, cuando tengamos un mejor coche, cuando nos podamos ir de vacaciones, cuando consigamos el ascenso, cuando nos retiremos. La verdad es que NO HAY MEJOR MOMENTO PARA SER FELIZ QUE AHORA MISMO. Es mejor admitirlo y decidir ser felices ahora de todas formas. No hay un luego, ni un camino para la felicidad, la felicidad es el camino Y es AHORA.
Atesora cada momento que vives y atesóralo más, porque lo compartiste con alguien especial. Tan especial que lo llevas en tu corazón y recuerda que el tiempo no es para nadie. Si no es ahora, ¿Cuándo? La vida siempre estará llena e luegos y de retos. Así que deja de esperar hasta que termines la universidad, hasta que te enamores, hasta que encuentres trabajo, hasta que te cases, hasta que tengas hijos, hasta que pierdas esos kilos de más, hasta que tengas mucho dinero… Hasta el viernes por la noche o hasta el domingo por la mañana, hasta la primavera o el invierno… para decir que no hay mejor momento que justamente este para ser Feliz.
Trabaja como si no necesites ese dinero, estudia como si no fueras a terminar la universidad, ama como si nunca te hubieran herido, comparte como si nunca esperas la paga, ayuda a los demás como si nunca te ayudaran a ti, habla con Dios a cada momento porque siempre te escucha y camina a tu lado.
Alberto Ibarra.