No One Lives review

Por Terrorweekend

Título original: No One Lives
Año: 2012
Duración: 87 min.
País: Estados Unidos
Director: Ryûhei Kitamura
Guión: David Cohen
Música: Jerome Dillon
Fotografía: Daniel Pearl
Reparto: Luke Evans, Adelaide Clemens, Lee Tergesen, Laura Ramsey, Lindsey Shaw, America Olivo, Derek Magyar
Ryûhei "festival" Kitamura nos regala una cinta cargada de violencia y entrañas.
Seguro que más de una vez has tenido el presentimiento que la estas fastidiando... que no deberías estar haciendo eso o simplemente un mal presagio sobre que las cosas no andan bien. Si no eres de esos posiblemente acabes muerto si te cruzaras con alguien poco deseable. Ya que antes que te des cuenta estarías con el cuello abierto o ahogado en tu propia sangre. Hay veces que es mejor no adentrarse en ciertos terrenos ni hacer enfadar a ciertas personas, esta historia narra una de esas ocasiones.
Una pareja se encuentra tranquilamente de vacaciones, pero estas se verán truncadas cuando un grupo de delincuentes locales les ataque con la intención de robarles el coche. Desgraciadamente la elección de los atracadores por asaltar a la pareja no es un gran acierto que se diga... ¿Destino? ¿Lugar equivocado, momento esquivado? Sea como sea una orgia de sangre está a punto de desatarse.
El director nipón Ryûhei Kitamura sigue su andadura por las Américas, y no defrauda. Su sello de locura y brutalidad sigue presente. Todos los fans del director están de enhorabuena, ya que No One Lives sigue la línea marcada en sus anteriores trabajos. Todo un festival de violencia desmedida, personajes muy pintorescos, y gore de gran calidad.
Sociópata, asesino en serie, despiadado, frio, calculador, perfeccionista, son solo algunos de los adjetivos que podemos dar al protagonista de la nueva película de Kitamura. Interpretado a la perfección por Luke Evans (Immortals, Robin Hood, Blitz), que resulta implacable como un terminator y tiene ante la pantalla una presencia digna de un anuncio de Calvin Klein. Destacar también la actuación de Adelaide Clemens como sufrida víctima del killer.
Lo mejor del film es que se nos presenta sin pretensión alguna y en tono de desfase total, pero nunca cayendo en la parodia, casi se podría describir como humor negro. Simplemente disfrutar de un film gore de terror en el cual el director se ha regalado en todos sus aspectos. Hay que remarcar en el apartado técnico el brillante trabajo de maquillaje, simplemente brutal y sin duda ayuda más si cabe a ensalzar el festival de vísceras que es No One Lives.
Recomendable 100% para todos los amantes del terror, aunque no es apta para todo el mundo, debido a su brutalidad y el gran numero de escenas explicitas. Si la podéis ver en pantalla grande no lo dudéis ni por un segundo. Imprescindible para los seguidores del director. Y para nosotros que la hemos podido gozar en el arco del festival de Sitges ha sido toda una fiesta del cine.
Firma: Omar Parra.