Don't step on that spider, it might be Lon Chaney! En 1923 Lon Chaney había participado en más de un centenar de películas y era ya una verdadera estrella. Todo el mundo hablaba de él y de sus sobrecogedoras interpretaciones. Era tal su capacidad para introducirse en la piel de cualquier personaje, por extraño que fuese, que era habitual escuchar a niños y mayores pronunciar la divertida frase cuando se encontraban con una araña.
Pero todavía faltaba lo mejor: 'The Hunchback of Notre Dame', 'He Who Gets Slapped', 'The Unholy Three', 'The Phantom of the Opera', 'The Unknown', 'London After Midnight', 'West of Zanzibar'... Si no habéis tenido la oportunidad de ver ninguna película de Chaney, subsanad ese error cuanto antes. Mucho se puede escribir de las mil y una anécdotas acaecidas durante la carrera de Lon, pero nada es comparable a disfrutar alguno de sus inolvidables films.
Si la opción de sentarse a ver algo rodado en los años veinte os produce algo de recelo, quizá sea una buena idea empezar por 'El hombre de las mil caras', una muy buena película sobre la vida de Lon Chaney protagonizada por nada menos que James Cagney. No es completamente fiel (¿qué biopic lo es?) pero es una muy buena introducción al mundo de Lon Chaney.
Hoy se cumple el 83º aniversario de su muerte y en este caso sí que se puede decir sin miedo a equivocarse que nunca hubo nadie como él y nunca lo habrá. Ya sabéis, la próxima vez que veáis una araña, no la piséis por si acaso...