No puedo controlar las tarjetas fue lo que me dijo esa persona que buscaba mi ayuda en el tema de gestión financiera. Cuando me lo dice fue de una manera desesperante y como quien no tenía idea de qué hacer ahora.
Mientras trabajaba su caso entendí que es una situación por la que varias personas pueden estar pasando y que necesitarían de la asistencia profesional que le permita salir de ella. No obstante, queremos ofrecer algunas pautas básicas para manejar la situación de manera inicial, hasta que pueda conseguir el acompañamiento apropiado, y así resolver el problema en manos.
Cuando las tarjetas están fuera de control, sin duda alguna, esto es un problema. Por lo general, la persona entra en un estado de inestabilidad financiera; y es una de las deudas que tienden a crecer, en términos de monto, de manera más acelerada. Porque se crea un círculo vicioso de pagar montos mínimos, que al final del día solo dilatan lo inevitable del colapso financiero.
En ese tenor, el problema de las tarjetas fuera de control reside en que la persona, de manera sigilosa, puede perder la noción de cuánto realmente adeuda, mientras que la deuda sigue creciendo, y llega a un estado de indiferencia respecto de tomar acciones correctivas para eliminar esta situación financiera.
Es por esta razón que vamos a ofrecer algunas pautas que permitan asumir medidas de ajuste para tener un mejor desempeño en la gestión del dinero. No obstante, este tipo de realidades es mejor manejarlas con el acompañamiento de profesionales de las finanzas que le guíen, durante todo el proceso, el saneamiento financiero y así tener resultados que perduren en el tiempo.
Para abordar este problema tenemos que partir de que, en primer lugar, existe una realidad de descontrol en la toma decisiones de consumo y, en segundo lugar, la tenencia de varios instrumentos de deuda plástica, es decir, en tarjeta de crédito. Por lo tanto estamos hablando de una conducta que debe ser reencausada hacia el manejo efectivo de este instrumento.
En ese sentido, este es un proceso que no tiene resultados inmediatos. De hecho toma un tiempo importante porque implica reenfocar la forma en que se maneja el dinero. No obstante, es efectivo. Porque, al final del día, la persona logrará darle un giro a la forma en cómo, en lo adelante, toma decisiones de consumo.
Pauta No. 1: Cesar el uso de las tarjetas
La primera pauta, y a la vez el primer paso, para resolver el descontrol con las tarjetas es cesar el uso de ellas. Cuando una persona está enredada con deudas de tarjeta de crédito y quiere solucionar su situación, lo primero que tiene que hacer es detener su uso, porque de esa manera para el ciclo de uso y reúso del plástico. Y descontinúa el circulo vicioso en el cual está metido(a).
Pauta No. 2: Establecer un régimen de consumo restrictivo
La segunda pauta a tomar en cuenta es definir un régimen de consumo restrictivo. Esto es, analizar cuáles son las cosas básicas que necesita para vivir. Y, en función de ellas, descartar todo consumo que no aporte valor.
Es importante resaltar que en esta pauta es prudente que una tercera persona de confianza, pero objetiva, entre en escena. Sirviendo como fuente de apoyo y medida de control en el proceso. De manera que pueda ser más llevadero.
Volviendo al establecimiento del régimen; la persona debe definir de forma clara y precisa qué es lo necesario en su vida; y qué es un accesorio. A razón de que el uso de las tarjetas fuera de control, por lo general, son consumos que no aportan al buen desempeño financiero personal, y desbalancean todas las cuentas.
Una herramienta que pueda ser de utilidad es el presupuesto; y adjunto a este, las listas de compras. En donde se establecen y priorizan las necesidades sobre los deseos; pero al mismo tiempo, se definen controles para el manejo del dinero.
Pauta No. 3: Defina una estrategia para saldar las deudas de las tarjetas
En esta tercera pauta la asistencia profesional es clave. Porque la elaboración de la estrategia para saldar las cuentas pendiente de las tarjetas de crédito requiere de cierto nivel de experticia, aunque esto no quiere decir que una persona sin la experiencia no lo pueda hacer. Lo que sucede es que es más fácil cuando intervienen profesionales de la materia.
A todo esto, en esta pauta es determinante tener una panorámica real de la situación financiera que se está vivenciando. Esto se logra elaborando un cuadro en donde se clasifican los distintos compromisos de tarjeta de crédito asumidos, con los plazos y cuotas vencidos, además de las diferentes tasas de interés.
Al tener esta panorámica la persona podrá identificar la manera idónea en que pude abordar la problemática del descontrol en la gestión de las tarjetas de crédito.
Resolver el problema de las tarjetas de crédito fuera de control es una acción que tiene que venir de la mano de la disciplina y el enfoque en solucionar la situación. Es importante que la persona haga un alto en el uso de este instrumento, defina una nueva metodología de consumo y establezca una estrategia para saldar cada una de las deudas pendientes. De manera que se pueda reencausar la gestión financiera personal.
En ese sentido, si esta entrada sobre cómo manejar el tema de las tarjetas de crédito fuera de control le ha sido de utilidad, le invitamos a que lo comparta y comente. Sus opiniones son de gran importancia para esta comunidad y enriquecen el debate. Y si le interesa profundizar en el tema de la gestión financiera efectiva le sugerimos adquirir el libro ¿Cómo llego a fin de mes? escrito por Andrés Panasiuk haciendo clic en la imagen más abajo.