No se aceptan devoluciones, la peli mejicana que triunfó en USA

Publicado el 05 noviembre 2020 por Anuskilla80

Es curioso que los americanos sigan insistiendo en hacer remakes de películas que triunfan a lo loco. Poseen una habilidad única para no ver nada que no sea en su idioma. No les vale el doblaje, los subtitulos, ni otra opción que no sea hacer la peli/serie ellos mismos. Incluso si se trata de producciones británicas, vamos que ni el acento de fuera toleran. Eso siempre me ha parecido bastante nazi. Esto hace que se den paradojas como que en sus premios a cine de habla no inglesa sean los menos votados porque les obligan a ver (y demostrar haber visto) las películas nominadas para poder emitir el voto. Por eso si no tienen un interés especial prefieren dejar sin votar esa categoría antes que tragarse un film rumano. Y por eso también al final los académicos europeos suelen ser los que deciden esta categoría.

¿Todo esto tiene que ver con la película de hoy? No del todo. Simplemente el hecho de que una película mejicana en versión original haya sido un éxito en América hizo que la curiosidad me animara a dar al play a esta cinta que se encuentra en Amazon Prime. Se trata de No se aceptan devoluciones.

El planteamiento de la película no os va a resultar nada original. Un mejicano pendón y mujeriego se dedica a disfrutar y retozar con todas las americanas solteras que buscan un romance tórrido con un macho hispano en sus vacaciones en Acapulco. Cada día con una mucha ha nueva, sin oficio ni beneficio y viviendo la vida padre transcurre la vida de Valentín hasta que deja de ser vida y se convierte solo en padre.

Uno de sus antiguos ligues se planta en la puerta de su casa y le deja un bebé. Se llama Maggie y es su hija. La madre, americana, se da a la fuga y se queda con el marrón y el bebé. Intenta devolverla colándose en Estados Unidos de forma poco legal y allí de asienta y forma su pequeña familia. Él no habla ni papa de inglés y cría a la niña en la anarquía colmándola de regalos y extravagancias hasta que aparece su madre de nuevo.

Pues bien. La primera parte de la película transcurre como es de prever, convencional pero simpática. Luego se convierte en una suerte de Kramer Contra Kramer y aún tiene una última parte más intima y emotiva. Pero hasta aquí puedo leer para no destripar la gracia de la película.

Siempre recomiendo que se vean las cintas en versión original siempre que sea posible pero en este caso es necesario porque aunque podéis encontrar una versión doblada el resultado es una bizarrada muy grande porque se repiten contenidos, se pierden bromas y desparece el contraste cultural que forma parte de la segunda parte de la película.

La cinta en un canto al amor paternal, sin condiciones y más allá del envoltorio azucarado tiene grandes aciertos que compensan de lejos sus errores. Consiguen superar sus fallos de ritmo con giros locos y cambios de registro. Sus actores principales trasmiten una ternura increíble desde el padre por sorpresa, la niña adorable o el productor loco que es su mejor apoyo. No es una gran historia, es una trama tramposa y tiene deficiencias pero aún así es adorable y de comprende que América se haya rendido a esta comedia que es una digna actualización de Paco Martínez Soria al siglo XXI.

Me he reído bastante e incluso he llorado un poco en alguna ocasión. Es tramposa, sí, pero también es una película de factura muy decente. Por eso, si no tenéis una opción para ver en casa y queréis una comedia familiar puede que esta sea una opción muy razonable.

La cinta costó 5 millones y en Estados Unidos llegó a conseguir 39 millones convirtiéndose en la cinta de habla hispana más taquillera de todos los tiempos en América. ¡Casi nada!