NO SE LO DIGAS A NADIE
El tiempo corre que es una barbaridad y es que el muy cansino no para, ni deja quieto a nadie. Lo que antes eran caperucitas de 14 años, ahora pueden ser lobas con una ferocidad que para sí la quisiera Marc Ostarcevic cuando se enfrenta a la Patiño.
La película que quiero que disfrutemos este fin de semana se llama ‘Hard Candy”, término que denomina en inglés a las jovencitas menores de edad que buscan por internet enrollarse con tipos mayores que ellas.
No recomendable para personas cuya sensibilidad sea permeable a temas tan comunes y resbaladizos como la pederastia, la venganza o la violencia, la película juega duro desde la primera secuencia y, la excelente labor de su guión al dosificarte la información hace que te vayas identificando con uno u otro protagonista, aún sabiendo que son personas cuanto menos reprochables.
‘Hard Candy’ (2005) supuso el debut en la dirección de británico David Slade (acaba de dirigir una película de la saga ‘Crepúsculo’) que venía del mundo del videoclip, detalle que se puede apreciar en alguna escena aislada.
Una dirección efectiva y cargada de atmósfera, un guión inteligente y un tour de force de alta graduación entre dos actores desconocidos (hasta entonces) para el gran público son razones más que contundentes para que des por bien aprovechadas un par de horas de tu descanso semanal.
Vista con 5 años de perspectiva, lo más memorable es la actuación de la jovencísima Ellen Page, luego vista en ‘Juno’ o en ‘X-Men’. Tenía apenas 18 años cuando rodó la película, algunos con 50 años de carrera nunca llegaron a ese nivel de calidad interpretativa. No voy a descubrirla ahora, pero sigámosle la pista porque esta chica por sí sola vale el precio de una entrada de cine.
El dulce caramelo que anuncia el título puede que se le atragante a más de uno en un film en el que nada es lo que parece y la razón absoluta nunca pertenece a nadie. ¿Doble moral? Como la vida misma.
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