Isaac Bashevis
Cuando sos argento y te mudás al otro lado del océano la carne contextualizada en un buen asado y el dulce de leche son parte de la melanco pelotuda, y recalco la pelotudez porque nos hacemos los afectados por esas cosas que pareciera ser que solo en Argentina existen, cuando en realidad en un mundo "ebolizado", todo llega a cualquier lugar, así que lo único genuino como parte del folclore argentino es la boludez de creernos que solo en Argentina se prueba el dulce de leche o se come un buen asado. Eso si, en Londres comer un asado en un restaurante Argentino te puede salir mas caro que sacarle un pasaje a una vaca vuelo directo por British Airways.
Pero que pasa cuando nos encontramos con gente vegetariana? Es todo un tema porque al creernos que todo comienza y termina en la carne -hasta podemos creer que la vitamina D te la da una morcilla- se nos hace difícil creer que hay otras posibilidades y que la naturaleza es aún mas sabia que ese parrillero que tenemos por conciencia.
Raquel, una vasca macanudisima con quien tengo la suerte de trabajar y con la cual nos hemos hecho amigos (Raquel, si lees esta nota, macanudisima significa "majisima") es entre otras cosas, vegetariana. Por supuesto hemos tenido varias discusiones al respecto y hasta he intentado en vano explicarle los beneficios de la carne. Cuando me contó que su hija Itsaso estaba con fiebre le dije: "Esa niña necesita una hamburguesa, joder!"
Pero como no se puede discutir sin saber -deporte Argentino por excelencia- hoy fui a almorzar a su casa en Greenwich en el sudeste de Londres. Me gustaría sin embargo hacer una breve categorizacion personal de los vegetarianos que me he encontrado en general:
1)VegeAfectado: No comen carne porque simplemente no comen cadáveres y están en contra de la matanza de animales para comer. Muy noble, pero es de boludo, no me jodan.
2)VegeDigestivo: Simplemente la carne les cae mal y encuentran en otros alimentos los mismos beneficios. Muy lindo, pero igual no los entiendo. Un churrasco chorreando sangre para mojarlo con pan es un placer que todo el mundo debería probar.
3) VegeExtremo: No como huevo, no come pescado, no come pollo, no come carne....(Cerrame la mesa 3, la 24, cerrame el bar y cortame la calle, me fui porque no puedo explicarlo)
(no me voy a jugar mi amistad con Raquel y como no tengo huevos no voy a ponerla en ninguna de estas 3).
El día llegó. Me levanté temprano, desayuné mas fuerte que de costumbre ya que el fantasma de un almuerzo de lechuguita y tomates me atormentaba porque yo con hambre.....
Con el protocolo que me caracteriza lo primero que hice al pisar la casa de Raquel fue comunicarle sobre el hambre que ya tenia (mi desayuno se había reabsorbido en este cuerpito gentil en la hora de viaje) y la vasca muy categórica como es me dijo: -Pues que eres marrano, espera que te he hecho una entrada de sorpresa, te he hecho empanadas!- Dos opciones inmediatas se me presentaron en la cabeza:
1) Conociéndola a Raquel supe que seguramente no iba a cocinar carne, introducir carne en su cocina seria una violación al templo.
2) Empanadas de lechuga (el horror)
Haciéndome el boludo fui a la cocina y vi algunas empanadas friéndose. Por fuera todo generaba confianza ya que se veían como toda empanada, la cuestión era el contenido. Una vez servida la entrada el momento de la verdad había llegado.
La pinta de la entrada. Empanadas veges con ensalada y obvio, un Malbec
Teniendo en cuenta que mi paladar no distingue lo crudo de lo cocido lo cierto que con estas empanadas muy ricas al primer mordisco -y así hasta terminarlas- no pude darme cuenta de que se trataba lo que incluso, parecía carne picada. Ahora los papeles se habían invertido y esta vez era yo el que era escrutado por una vegetariana orgullosa de su conquista: un carnívoro de pura cepa.Habiendo aclarado sobre mi paladar de perro bulldog, no pude darme cuenta que era eso tan sabroso que incluso parecía carne. Una vez que Raquel se cansó de regocijarse en el misterio, éste fue develado: SOYA.... LO QUE?!. Si señores, unas empanadas para chuparse los dedos con relleno de Soya! un manjar! (si después de esta nota no me convierto al cristianismo le pego en el palo), eso sumado a la ensalada con nuez, queso azul y rodajas de peras...la entrada estuvo más que aprobada.
El plato principal, un risotto a la cerveza que me morí muerto de lo rico que estaba. En fin, toda una experiencia que si no fuera Argentino reconsideraría mi dieta y hábitos alimenticios pero abandonar la carne o el mate sería un acto de alta traición. Lo cierto que para ser vegetariano uno debe tener mucha inventiva culinaria para no caer en el lugar común de la lechuguita y el tomate y la cocina no es mi lugar favorito de mi casa y si encima tengo que ponerme a inventar olvidenlo, le corto una patita a Norton y la hago a la parrilla.
A quien le vas a hacer la patita a la parrila vos? YO estoy sentado en tu pata, gil!
Este post podría ser una reivindicación de los vegetarianos y un palo para los que hacemos de la carne la ostia de cada domingo (les dije que por ahí me hacia cristiano), pero lo cierto es que por primera vez en mi vida me he sentado en una mesa con este tipo de comida y fue toda una experiencia. Se las recomiendo.Nota: Eviten los de categoría 3, seguro la pasan mal.
y para cerrar eh aquí, y ahora si es reivindicatorio, mi verdad sobre la carne:
Yo no soy vegetariano porque ame a los animales….. ¡soy vegetariano porque odio a las plantas!
Mi adorada Raquel....quien me inspiro e hizo que abriera mi blog nuevamente después de mas de un año.
wow, hasta parece saludable para no comer nunca carne!