Al fin y al cabo todos queremos ganar y es el fin al que se pretende llegar en este juego del fútbol, la diferencia está en el cómo así como el camino y procedimiento utilizados. Esa es la diferencia entre los que pasarán a la historia por la huella que hayan dejado, como es el caso de Guardiola y los que simplemente se recordarán por los goles que marcó su equipo, los partidos que ganó o los títulos que consiguió, algo que resulta ser volátilmente olvidadizo con el tiempo (los de pensamiento rápido y poco profundo pensarán que me estoy refiriendo con esta reflexión a Guardiola versus Mourinho. Nunca más lejos de la realidad, expresamente me refiero a un grupo reducido de entrenadores frente a un grueso que no van más allá de unos simples datos numéricos como consecuencia de su paso por un equipo de fútbol).
Al fin y al cabo todos queremos ganar y es el fin al que se pretende llegar en este juego del fútbol, la diferencia está en el cómo así como el camino y procedimiento utilizados. Esa es la diferencia entre los que pasarán a la historia por la huella que hayan dejado, como es el caso de Guardiola y los que simplemente se recordarán por los goles que marcó su equipo, los partidos que ganó o los títulos que consiguió, algo que resulta ser volátilmente olvidadizo con el tiempo (los de pensamiento rápido y poco profundo pensarán que me estoy refiriendo con esta reflexión a Guardiola versus Mourinho. Nunca más lejos de la realidad, expresamente me refiero a un grupo reducido de entrenadores frente a un grueso que no van más allá de unos simples datos numéricos como consecuencia de su paso por un equipo de fútbol).