La carga rápida ha cambiado la forma en la que interactuamos con nuestro terminal. Aunque la autonomía sea más o menos mayor, el miedo a quedarnos sin batería es mejor, al menos cuando sabemos que en unos pocos minutos conectados, podremos tener autonomía para el resto del día. Sin embargo, hay un buen puñado de usuarios reticentes a usar esta tecnología, con la que se encuentran en sus nuevos móviles que desean desactivar a toda costa. Si eres uno de ellos, sigue te interesa seguir leyendo...
La carga rápida está envuelta en polémica desde sus inicios, debido a que algunos experimentos han demostrado que puede afectar a corto y largo plazo a la vida útil de las baterías. No obstante, también es cierto que el avance en esta tecnología ha sido muy rápido, y los terminales de hoy integran medidas de seguridad que evitan sobrecargas, calentamientos y demás enemigos de nuestro móvil. Sin embargo, muchos usuarios que no tiene prisa, prefieren usar la carga "de toda la vida".
¿Se puede desactivar la carga rápida del móvil?
La respuesta es un sí y no casi a partes iguales. No es tan sencillo desactivar la carga rápida de forma tan sencilla como mover un interruptor en el menú de ajustes. La mayoría de marcas no han no han habilitado esta posibilidad, por lo que tendremos que usar otros métodos alternativos o trucos para que la carga rápida no tenga efecto sobre nuestro móvil.
Samsung es la excepción
La compañía coreana es la única que permite desactivar la carga rápida en sus móviles o limitar su velocidad mediante las diferentes opciones. Los móviles con carga rápida de la firma como las familia Galaxy S, Galaxy Note o Galaxy A, cuentan con este ajuste. Para acceder tendremos que entrar en Ajustes/Mantenimiento del dispositivo/Batería/Carga. Una vez dentro de este apartado podremos desmarcar las opciones "Carga ultra-rápida" y "Carga rápida" para dejar sin efecto esta tecnología y volver a la carga estándar.
En el resto de móviles
Para el resto de dispositivos Android o los iPhone de Apple con carga rápida, tendremos que usar métodos de guerrilla para inutilizar esta capacidad de carga.
Cambiar el cargador o el cable
Este es un método que funciona, pero debe ser realizado teniendo en cuenta que todos los fabricantes sin excepción recomiendan usar el cable y el adaptador incluido en la caja. No obstante, si cambiamos estos elementos a algunos estándar que tengamos de otro terminal más antiguo, nuestro terminal no podrá realizar el proceso de carga rápida e inutilizaremos la función.
¿Tiene carga inalámbrica?
Si tu móvil admite la carga inalámbrica podremos usar este método, ya que la velocidad de carga es mucho menor, siendo de 15W en la mayoría de los casos. No obstante esta tecnología también está creciendo a ritmos agigantados, equiparándose cada día más a la carga con el cable. En el caso de que nuestro móvil no posea este tipo de carga, siempre podremos este truco para tener carga inalámbrica en cualquier móvil.
Cargar el móvil en el PC
Este método es ideal para aquellos que manejen su PC de forma diaria, ya que encenderlo solo para cargar el móvil no tiene mucho sentido. En este caso necesitamos el cable USB de nuestro móvil y ponerlo a cargar en alguno de los puertos USB del ordenador. La carga se realizará mucho más despacio y podremos estar tranquilos en el caso de que la carga rápida nos preocuope.