Ufff!! Había escrito un montón hace unas horas, y por algún problema de Blogger no se publicó ni guardó... Será algún fantasma gastandonos una broma?? ;-) En Argentina, históricamente, jamás se celebró Halloween... sin embargo, con todo este tema de la "globalización", las pelis y los dibujitos que muestran esta fiesta, que desde mi punto de vista es super pintoresca, ya nos encontramos "importandola" desde el país del Norte (importaremos también Acción de Gracias?). Halloween era, originariamente, una fiesta pagana. Hoy me puse a investigar un poco sobre sus orígenes (más abajo pongo algo de info) y me pareció super interesante como fue derivando de la fiesta de Samhain a esta "noche de brujas". En definitiva, mis niños han venido incorporando esta fiesta foránea de a poquito. Primero fue cuando un grupo de niños nos tocó el timbre, hace unos 4 años... de allí pasamos a pedirme que les hiciera unas calabazas hace dos o tres años atrás, el año pasado lo festejamos "internamente" (les regalé caramelos yo), y este año, a raíz de la invitación de unos amiguitos en cuyo barrio se festeja bastante, terminamos con disfraces y golpeando puertas al grito de "Dulce o Truco!!". La verdad que lo pasaron bárbaro, se super divirtieron, y recaudaron unos cuantos caramelos y chupetines. Personalmente, no me molesta importar fiestas extranjeras. En definitiva, todas y cada una de las fiestas que celebramos en Argentina (las que realmente se celebran) son extranjeras: Pascua, Navidad, Año Nuevo, Carnaval... Y también me divierte celebrar el día de la Pacha Mama!! Son dos cosas distintas, y no necesariamente tienen que ser opuestas, más bien, depende de nosotros, y nuestro espiritu festivo, que puedan ser complementarias. Creo que de cada fiesta, podemos aprender algo... yo hoy aprendí de antiguas creencias por algo tan simple como que mis hijos quisieran disfrazarte y tocar algunas puertas... Así que les deseo a todos, una Felíz Noche de Brujas!! Que pasen una bonita noche!! ;-)
Una antiquísima tradición celta halloween Por fuerza de la mundialización, tradiciones heredadas de esta antiquísima fiesta de origen celta se están extendiendo tan rápidamente en los países hispanohablantes que vale la pena echar una ojeada a su origen, por más que halloween no haya sido originariamente una palabra de nuestra lengua.
En la Antigüedad, en Bretaña, Escocia e Irlanda, se festejaba la fiesta de Samhain el 31 de octubre, último día del año en los antiguos calendarios celtas y anglosajones. En esas ocasiones, se encendían grandes hogueras en lo alto de las colinas para ahuyentar a los malos espíritus, y se creía que las almas de los muertos visitaban sus antiguas casas, acompañadas de brujas y de espíritus. En algunas regiones de Galicia, se mantiene hasta hoy la antigua costumbre celta de hacer caras en calabazas huecas iluminadas con velas por dentro, cada noche de 31 de octubre.
Con la llegada del cristianismo, se estableció el primero de noviembre como Día de Todos los Santos, y el 31 de octubre pasó a llamarse en inglés All Saints' eve (víspera del Día de Todos los Santos) o también all Hallows' eve y, más recientemente, Hallows' eve, de donde derivó halloween. Hallow es palabra del inglés antiguo, significa 'santo' o 'sagrado' y, como el moderno vocablo holy, proviene del germánico khailag.
Muchas de las tradiciones de halloween se convirtieron en juegos infantiles que los inmigrantes irlandeses llevaron en el siglo XIX a los Estados Unidos y, desde allí, se han extendido en las últimas décadas por el mundo hispánico.
(este texto me fue enviado por correo electronico a través de "La Palabra del Día").
Jack-o´-lantern Existe un viejo relato popular irlandés que habla de Jack , un perezoso pero astuto granjero que usó una cruz para atrapar al Diablo. Una de las versiones cuenta que Jack engañó al Diablo haciéndole subir a un manzano, y luego puso rápidamente cruces alrededor o talló una cruz en el tronco, para que el Diablo no pudiera bajar. Otra versión del mito dice que Jack estaba siendo perseguido por algunos aldeanos a quienes había robado cuando se encontró con el Diablo, quien le dijo que había llegado el momento de su muerte. Sin embargo, el ladrón retrasó su suerte tentando al Diablo a castigar a los aldeanos que lo perseguían alegando que eran fieles a Dios. Jack le dijo al Diablo (quien podía adoptar cualquier forma) que se convirtiera en una moneda con la cual pagaría por los bienes robados; luego, cuando la moneda/Diablo desapareciera misteriosamente, los aldeanos pelearían entre sí para averiguar quién se la ha robado. El Diablo accedió a la propuesta: se convirtió en una moneda de plata y saltó al saco que Jack llevaba, solo para encontrarse junto a una cruz que el ladrón había también robado en la aldea. Jack cerró bien el bolso y la cruz privó al Diablo de sus poderes; y así lo atrapó. En ambos mitos, Jack solo deja ir al Diablo cuando éste accede a jamás llevarse su alma. Luego de un tiempo Jack muere, como cualquier otro ser viviente. Por supuesto, su vida había sido demasiado pecaminosa como para poder entrar al Cielo; no obstante, el Diablo había prometido no llevarse su alma, y así quedó también fuera del infierno. Ahora Jack no tenía adonde ir. Se preguntó cómo podría ver a donde iba, ya que no tenía luz alguna, y el Diablo le arrojó, a modo de burla, una brasa que nunca dejaría de arder con el fuego del infierno. Jack ahuecó uno de sus nabos (su comida favorita), puso la brasa en su interior y comenzó a vagar eternamente y sin rumbo por todo el mundo para encontrar un lugar donde finalmente descansar. Entonces pasó a ser conocido como Jack of the Lantern (“Jack la linterna”), o Jack-o’-Lantern. La linterna de Jack en Irlanda y Escocia era un nabo tallado con la supuesta cara tenebrosa de Jack, que solían colocar en las ventanas para ahuyentar al diablo y a todo espíritu maligno de sus hogares.2 La leyenda tiene varias versiones:
- Algunas incluyen un “hombre sabio y bueno”, o incluso a Dios mismo ayudando a Jack a prevalecer sobre el Diablo.
- Hay varias versiones del acuerdo entre Jack y el Diablo. Algunas dicen que el trato era solo temporal pero el Diablo, avergonzado y vengativo, niega la entrada de Jack al infierno después de que este muera.
- Jack es considerado un hombre codicioso y es rechazado tanto en el Cielo como en el infierno, mientras que al Diablo no se lo menciona siquiera.
- En otras versiones, Dios le da a Jack el nabo.
- Una variante afroamericana sostiene que Jack, llamado Gran Dieciséis, consigue matar al Diablo, siendo posteriormente rechazado en el infierno por la viuda del mismo.