Sigo amenizando mis tardes (aunque la de hoy ya es post-navideña muy a mi pesar...) contándoos cositas sobre productos que voy probando o que consumo habitualmente. En esta ocasión, os hablaré de un producto que conozco de toda mi vida, que llevo consumiendo desde que tengo uso de razón y que, especialmente durante todo el embarazo, ha estado presente como una especie de antojo del que aún, tres meses después de dar a luz, no me he podido liberar. Os hablo de la NOCILLA, aunque más que hablaros del producto en si, hoy quiero hablaros de sus envases: ¡LOS VASOS!
¿Quién no tiene un vaso de Nocilla en casa? Bueno, seguro que hay alguien que se da por aludido, pero... somos muchos más los que tenemos alguno por ahí, ¡seguro que si! Yo tengo bastantes, no solo ahora sino también los tenía de pequeña, me encantaba beber con ellos así que a día de hoy me siguen recordando a mi infancia.
LO MEJOR DE LA NOCILLA... ¿EL CHOCOLATE, O SUS VASOS?
Difícil pregunta.
La verdad es que, para mi, no existe una cosa mejor que otra. Las dos, en su medida, se complementan muy bien...
La Nocilla, como sabemos, es una crema al cacao de chocolate, muy cremosa, que no solo podemos tomar con pan, o con galletas, o con lo que nos apetezca (o casi), sino que además nos sirve para hacer recetas; bizcochos de chocolate, brownies, batidos... ¿Y que me decís de comerla a palo seco? Ay, ya se que es difícil resistirse, pero también tenemos que tener en cuenta que es un producto hiper calórico, que además tiene grasas trans a punta pala y que dispara los valores de colesterol y azúcar en nuestra sangre. Cierto, pero, si la comemos con moderación, ¡nos alegra el día!
En cambio, los vasos, son realmente útiles cuando la Nocilla se nos ha terminado. Si no fuera así, seguro que muchos de nosotros compraríamos el formato "tarro de plástico" en vez de el formato "vaso". Son vasos de cristal, y los hay de dos tamaños; uno pequeño (creo que es de 200ml, si no estoy equivocada) y otro grande, de 400 ml. Yo suelo comprar el formato grande, por varias razones; primero, porque así compro más Nocilla. Segundo, porque uso los vasos para beber en las comidas y me cabe más agua que en un vaso normal, de 250ml. ¡Y yo bebo mucho!
Estos vasos son de cristal, muy resistentes (se me han caído varias veces y no se me han roto, aunque esto es como todo... da igual que una caída sea leve, si le da en un sitio específico, se rompe...). Sus diseños son muy originales; la marca ya se encarga de ello, para que tengan atractivo. De vez en cuando sacan colecciones de vasos, para incentivar su compra. Hace unos meses sacaron una colección con vasos de diseño de Rosario Flores, ahora mismo están en plena colección de vasos con letras de Alejandro Sanz (¡¡ya solo me faltaba eso, con lo fan que yo soy!!), he visto que en el super ya están los primeros vasos de la colección Super Mario Bros, y anteriormente sacaron colección de las Super Nenas, o por lo menos me suena tener un vaso pequeñito de estas.
Su uso, una vez vacío, no se limita solo a beber; también podemos usarlo para más cosas. Aprovechando sus tapas de plástico rojo, podemos usarlos para guardar comida que hemos abierto previamente. Por ejemplo; aceitunas o tomate frito, o alimentos similares. Yo, por ejemplo, tengo un vasito pequeño de Nocilla que uso para guardar la mitad de las latitas del gato, pues no se come una entera nunca. Se tapan, se guardan en la nevera y lo tenemos disponible para la próxima vez que vayamos a usarlo.
Además, ese momento de estar en el super, delante de los envases de Nocilla, y elegir el vaso que más nos guste para comprarlo, es algo que sigo haciendo y que me recuerda mucho a mi infancia. De toda la vida recuerdo estar haciendo este ritual; elegir el vaso más chulo para quedármelo. Luego comerme la Nocilla, esperar a que se terminara para usarlo, tener que lavarlo cuando se termina... (siempre pienso que el lavavajillas no va a poder con los restos, ¡pero siempre termina ganando!) y cuando ya está limpio y listo para usar, sacarlo a la mesa para beber con él por primera vez... ¡da mucha ilusión!
La verdad es que, como digo, esto de los vasos es un aliciente para comprar Nocilla. No se como otras marcas no lo han copiado ya. Si no fuera por ellos, yo seguiría comprando Nocilla porque me encanta, pero no sería lo mismo.
Si vosotros no os habéis decidido a comprar uno de estos envases, yo os lo recomiendo. Sobre todo si tenéis niños o sobrinos que frecuentan vuestra casa, seguro que les divierte y les motiva a la hora de la comida. Es una muy buena idea a tener en cuenta. Pero, cuidado, ¡que coleccionar vasos termina enganchando!
Os dejo con unas fotos de algunos de mis vasos.
Muchas gracias por vuestras lecturas, valoraciones y comentarios.
BESOS!!***
Colección de vasos Reyes Magos. Compré los tres envases en un pack especial en la Navidad del 2015
Colección completa de vasos Alejandro Sanz