Hubo una época en que la palabra Nokia era sinónimo de tecnología móvil; sí, esos felices días antes de la llegada de Steam, cuando el Counter-Strike 1.5 reinaba en los cibercafés, tu navegador favorito era Netscape, y tu única forma de comunicarte con el mundo exterior era tu confiable ladrillo marca Nokia. Fueron buenas épocas, vaya.
Desde hace ya algún tiempo se ha estado rumorando fuertemente que Nokia planea volver a la acción, pero un reporte reciente del portal NokiaPowerUser (una fuente muy confiable) ha avivado aún más la llama. De acuerdo con dicho reporte, dos terminales habrían entrado en fase prototipo, y su lanzamiento estaría previsto para finales de 2016. Ambos dispositivos vendrían con Android 7.0 Nougat de fábrica.
El más grande tendrá una pantalla de 5.5 pulgadas, mientras que el más pequeño un panel de 5.2 pulgadas; sus resoluciones aún no han sido reveladas. Ambos teléfonos vendrán equipados con una versión aún no lanzada de Z Launcher.
Todo esto suena muy interesante, sin duda. Por el momento no hay más información al respecto, pero apenas se sepa algo más te informaremos, que también estamos emocionados. Mientras tanto, si te interesa saber cómo Nokia llegó a esta situación, sigue leyendo:
Breve historia de Nokia
Todo rodó cuesta abajo a partir de aquí. / © The New Yorker
Nokia (junto con Blackberry) es el gran ejemplo de qué no debes hacer cuando estás en la cima. Cuando Nokia ya había matado a Symbian —una muy pésima decisión— ya iba en caída libre. Nada que Android no hubiera solucionado en un abrir y cerrar de ojos. Nokia sin embargo decidió apostar por MeeGo, un sistema operativo móvil libre basado en Linux, muy prometedor y avanzado para su tiempo.Es entonces que Stephen Elop, quien provenía directamente de Microsoft (díganme si no es muy sospechoso esto), entra como nuevo CEO de la compañía. Un auténtico caballo de Troya. Stephen Elop era el CEO de Nokia, pero trabajaba para Microsoft. Y su primera acción como dirigente de la compañía fue aniquilar MeeGo.
Un trasto de estos con Android y Samsung no hubiera sido lo que es ahora.
Bajo su mandato, Nokia pasó de ser una empresa que todavía tenía el 35% del mercado y cuyos beneficios aún eran de más de €820 millones de euros a tener una miserable cuota de mercado de 3%, a tener pérdidas de más de €100 millones de euros y a ser comprada por Microsoft a un precio ridículo y perder la totalidad de sus fábricas en finlandia. Una catástrofe de tales magnitudes no ocurrieron por casualidad, Nokia fue hundida de forma premeditada para favorecer a Microsoft.Por esas ironías de la vida, aún cuando Nokia fue finalmente asesinada y despojada de todas sus divisiones de desarrollo móvil e ingeniería, Microsoft nunca logró hacer que Windows Phone despertara interés, al punto de que hoy por hoy se le considera una plataforma muerta de forma no oficial. Justicia poética.