Norberto garcía hernanz

Por Acalvogalan


Mencionado por: Aarón García Peña
Menciona a: Carlos Marzal, Felipe Benítez Reyes, Luis Alberto de Cuenca, Juan Carlos Mestre, Santiago López Navia, Jesús Jiménez Reinaldo, Raquel Lanseros, Gonzalo Escarpa.
Bio-bliografía
Soy un poeta segoviano que he escrito varios libros de poemas y ganado premios como El Yantar de Pedraza (2004) o el Huerta de San Lorenzo (2006), quedando finalista en el Internacional “Jaime Gil de Biedma” en 2007 y 2008 y en el “Luna azul” en 2009 y 2010, entre otros. Mi interés por promover la poesía, me llevó a crear el Cuaderno de Profesores Poetas, desde el IES “Fco. Giner de los Ríos” de Segovia, donde ejerzo como catedrático de matemáticas y a organizar el Día Internacional de la Poesía por segundo año consecutivo, en esa ciudad, con afluencia de numerosos poetas de todo el territorio nacional. Además he dado recitales y conferencias y publicado en revistas como Poeta de Cabra, Alga, Río Arga, Luces y Sombras o Alkaid. Recientemente he publicado “Manual para Vacíos”, un viaje completo por los paisajes interiores del ser humano, haciendo la presentación en Segovia, Valladolid y Madrid.
http://poesiasdenorberto.blogspot.com/
Poética
Busco con la poesía, nuevas formas de sorprenderme a mí mismo y conseguir felicidad mediante el acto de la creación. Mi tema central, es el problema existencial en su totalidad y escribo (aun suponiendo la imposibilidad de resolverlo), con la pretensión de clarificar en mí y en mis lectores, las cuatro claves éticas sobre las cuales debe sustentarse una vida medianamente honesta, si queremos mantener las ilusiones y transformar el sinsentido y la carencia de objetivos de la realidad, en una representación vitalista y optimista de lo que nos toca vivir. Para abordar ese problema total, mi poesía utiliza temas anejos, como la inminencia, el tiempo, el espacio, el presente o el azar y todo ello bajo un punto de vista cercano al epicureísmo y al escepticismo, con ciertas dosis de estoicismo.
Poemas
HAEC DIES
Este es el día anunciado, en que el vértigo mortal
se arremolina contra el tiempo a cuatro grados
bajo cero y en que Venus se destaca inasumible
sobre el alba en Peñalara, mientras pinta un cuadro
abstracto de silencio interrogante con las lánguidas
estelas de tres leves reactores.
Es el día señalado en este invierno que se marcha,
para hallar al hombre nuevo que no llega a revelarse
como tal ni dos suspiros,
o de hacer causa común con un proyecto
universal que nos deshaga,
con el único objetivo
de poder suministrarnos plena paz.
Es el día en que amarré firme el presente
a mi paciente circunstancia con la cuerda
más valiente que encontré en la realidad:
el ahora mismo desatado.
ORACIONES DE EXISTENCIA
Vivir es una religión, de las más coherentes,
que yo sepa.
Su dios es la voluntad,
su profeta la experiencia,
sus sacramentos los malos tragos, ineludibles
y las frecuentes ocasiones en que nos miramos
así como diciendo: “Aquí estamos”,
su sentido, sentir,
su sutil teleología, dejarse, plácidamente acunar
en brazos de nadie, su objetivo, soportar
lo que nos venga y ser felices sin hacernos más preguntas
que las justas, su ágape, maravillarse y contarlo,
desear que llegue mañana y levantarnos, sin más, esperanzados
para seguir rezando en carne viva
oraciones de existencia.
INTENTOS DE ESPERANZA
Cuestión de creerselo que dicen que sucede,permitir que avance el díay se produzca la bondaddel desayuno caliente,clamar alto en el silencio:"Vas a ver, dura experiencia,de qué vale un "homo" iluso,si se empeña en ser un alguien",saludar, entusiasmados de estar vivos,a cualquier desconocidoy, en los parques, a los bancos,prepararse a ser llevados
por la inercia del destino
a cualquier parte
sin decir: "Qué mala pata".
Es cuestión, por lo que siento,
de creerse,
que mejor es regalar que preservar,
mejor fiarse que enfriarse
y que este día, en su sustancia,
es suficiente para darse a todo aquello
que jamás creímos cierto que ocurriera.
Más o menos, eso es justo lo que pienso,
mientras va avanzando octubre,
y escarchándose el aliento,
el pensamiento, los tejados,
y a menudo los intentos de esperanza
en esta vieja, azul, Castilla.