Para sorpresa de todos Van Lier se destapó como un correcto anotador, un tremendo pasador y un sobresaliente defensor. Acabó su primer año en Cincinnati con casi 10 puntos de media por partido, 5 rebotes y 6 asistencias. Números importantes para un tercera ronda del draft, pero impresionantes si el titular que tienes delante se llama Oscar Robertson. La temporada de los Royals fue desastrosa y Robertson pidió el traspaso, cosa que ocurrió con destino Milwaukee.
En la temporada 70-71 los Royals incorporaban via draft a otro base legendario, Tiny Archibald. Van Lier continuó la línea de su primera temporada y que a la larga le definió como jugador: apretar los dientes y luchar. Pese a tener una calidad inferior a la de Archibald, Van Lier jugó más de 40 minutos por partido y subió sus medias hasta los 16 puntos, 10 asistencias (líder de la liga) y 7 rebotes. Entonces no se contabilizaban los robos de balón, pero de ser así posiblemente estaríamos ante una temporada que pasaría a la historia en lo que a números individuales se refiere.
La estrella de aquellos Royals era Tom Van Arsdale y, pese a él, Archibald y Van Lier los Royals eran un equipo sin aspiraciones. Así que recién empezada la temporada 71-72 los Royals ven con buenos ojos el traspaso de Van Lier de vuelta a Chicago teniendo en cuenta el gran rendimiento de Archibald. Van Lier aterriza en Chicago con jugadores como Chet Walker, Bob Love o Jerry Sloan de compañeros. Sus números disminuyen hasta los 12 puntos, 7 asistencias y 4 rebotes (cosa lógica debido a que los Bulls eran un equipo muy potente con grandes jugadores y no le tocaba a Van Lier tirar del carro). Una vez más destaca por su entrega en la pista y es titular indiscutible. Los Bulls caen por 4-0 en semifinales de conferencia contra los míticos Lakers de la temporada 71-72.
Los Angeles Lakers se cruzarían en el camino de los Bulls al año siguiente, derrotándoles en semifinal de conferencia una vez más. Van Lier se destacaba esa temporada como uno de los puntales del equipo en todas las facetas del juego, destacando como siempre su capacidad de dirección y su defensa (14, 7 y 5 de promedio). Al año siguiente Van Lier mantiene sus números pero su increíble consistencia defensiva le hacen ser elegido para el mejor quinteto defensivo de la liga, para el segundo mejor quinteto y para al allstar. Los Bulls avanzan hasta final de conferencia pero se encuentran con su ex-compañero Robertson (y el gran Lew Alcindor - Kareem Abdul-Jabbar), dirigiendo con mano maestra a unos Bucks que les eliminan por 4-0.
El mismo guión se repetiría la temporada 74-75, en la que Van Lier promedia 15 puntos, 6 asistencias y 5 rebotes para llevar a los Bulls hasta las finales de conferencia una vez más. No fueron Lew Alcindor u Oscar Robertson sus verdugos, esta vez fue el gran Rick Barry el que haría que los Golden State Warriors se impusieran a los Bulls por un apretado 4-3. Aquellos Bulls se encontraron con todos los grandes equipos campeones de la década aunque siempre les faltó una pizca de suerte.
En la temporada siguiente los Bulls no hacen nada destacable, pero Van Lier es elegido para su segundo allstar y para el mejor quinteto defensivo de la liga. Los años iban pasando para unos Bulls que necesitaban sangre nueva. En la temporada 76-77 Artis Gilmore llega a Chicago y devuelve a los Bulls a playoffs para caer eliminados en primera ronda frente a los Blazers. Van Lier baja sus promedios anotadores hasta algo más de 12 puntos pero mejora sus pases de canasta hasta casi 8. Además vuelve a ser elegido para el allstar y para el mejor quinteto defensivo.
La 77-78 deja claro que los Bulls deben reestructurar el equipo para hacer cosas importantes, ya que no logran clasificarse para playoffs. Van Lier baja sus promedios hasta los 7 puntos, 7 asistencias y casi 4 rebotes. Al año siguiente Van Lier deja los Bulls y marcha a Milwaukee, donde juega su última temporada como profesional.
Norm Van Lier falleció el 26 de Febrero de 2009 en Chicago. Es el máximo asistente de la década de los 70 con un total de 5217 pases de canasta. Para valorar el dato basta decir que el segundo de la lista es John Havlicek con más 1000 asistencias menos. Es recordado como uno de los mejores defensores de la época y era un jugador con una entrega total en el campo. Su apodo Stormin' Norman le definía a la perfección. Otro de los grandes olvidados.
Ahí os dejo un vídeo con el juego de Stormin' Norman. ¡Clasicorros saludos!