“Norte y sur” de Elizabeth Gaskell

A través de la historia de Margaret Hale, una joven del sur de Inglaterra que por circunstancias familiares se ve obligada a trasladarse al norte, Elizabeth Gaskell plasma los conflictos sociales y políticos derivados de la revolución industrial en la Inglaterra de mediados del siglo XIX. Para la heroína, el sur donde ha nacido simboliza el idilio rural; frente a él, el norte es sucio, rudo y violento. Sin embargo, a medida que va penetrando en ese nuevo mundo y sus distintos estratos –desde Bessy, la joven obrera enferma y su padre, líder sindical, hasta John Thornton, dueño de una fábrica textil, por quien siente una creciente atracción- tendrá que ir corrigiendo sus prejuicios; y del mismo modo, su condición de mujer subordinada evolucionará hacia una madura aceptación de sí misma y de sus sentimientos. 
TÍTULO Norte y sur AUTOR Elizabeth Gaskell PÁGINAS 544 EDITORIAL Alba editorial GÉNERO Clásico 

¿Conocéis esa sensación de que estáis leyendo una historia de amor que ya conocéis y os encanta pero cuyo libro no termina de llenaros? No porque no sea bueno, formalmente hablando, sino porque le falta algo a la narración, una chispa o como queráis llamarlo, para que tal romance os termine de cautivar. Pues eso me pasó a mí con esta novela. Os cuento desde el principio porque si no dudo mucho que entendáis mi ¿decepción? con este clásico victoriano. 
Todo comenzó cuando, hablando con una compañera de curso sobre Orgullo y prejuicio (novela sobre la que ya os contaré en un futuro), esta me recomendó que viera la miniserie que la BBC hizo sobre Norte y sur de E.Gaskell. Primer error. Nunca, y cuando digo nunca es nunca, debéis ver una adaptación (ya sea cinematográfica o televisiva) de una novela que queráis leeros. Primero la leéis, y ya después si eso veis lo que sea que esté basado en la misma. El caso es que yo la vi, y la cautivadora historia de Margaret Hale y el señor Thornton me enamoró. Finalmente, y varios meses después, otra amiga me prestó la novela. Bueno, quizás fuera que esperara una narración similar a la de Jane Austen, o que no estuviera muy habituada a las novelas costumbristas, pero el caso es que al finalizar la lectura me quedó una sensación cuanto menos confusa. 
Por una parte me encantó el detallismo y realismo con el que la autora plasma de forma tan vivida una época concreta que, aunque ajena, llegas incluso a sentir como propia y cercana. Y por contraposición, esa desazón y constante espera de una pasión entre los dos protagonistas que no termina de llegar. Bueno, tampoco voy a exageraros y he de conceder que hay, no momentos, sino momentazos en la novela que, si finalmente decidís leer, no os defraudaran. Pero poco más. Y es que me esperaba algo más de romanticismo en una historia de amor que sin duda es de las más encantadoras que he visto, más que leído, nunca. Sientes al terminarla que podría haber dado mucho más de sí, que de hecho debería haberlo dado. No termina nunca de arrancar, y cuando en determinados momentos parece que por fin si, se desinfla hasta caer en una monotonía que llega incluso a hastiar. Es como que si pero no, llegando a convertirse en ocasiones sus escenas en aburridas. Aunque como ya os he dicho, gran culpa la tiene la miniserie, y es que la BBC es única a la hora de relatarnos semejantes historias, claro que esto último no deja de ser una mera opinión personal. 
Sin embargo, si os gustan las novelas de minucioso detallismo y magistral ambientación, os encantará. Cierto es que los ambientes que refleja (fábricas, barrios obreros, huelgas y sindicatos, etc.) tampoco deben desagradaros, pues de lo contrario se os hará bastante pesada, teniendo en cuenta la escasa presencia de la historia de amor. Por otra parte, y personalmente, los personajes secundarios me fascinaron, si bien es cierto que he echado en falta a algún antagonista claro y notorio. 
En definitiva, una novela interesante si os gustan y estáis acostumbradas (o acostumbrados, porque no) a este tipo de historias, o las buscáis deliberadamente. Eso sí, la miniserie es de obligatoriedad si es que os definís como románticas empedernidas. Pero de ella ya hablaremos en un futuro. 
Saludos y hasta la próxima =)