Not a Good Sign - Icebound (2018)

Publicado el 30 julio 2019 por Moebius
Cada tanto le doy una vuelta a este disco que me encanta, para mí uno de los mejores discos del 2018, y otro disco de origen italiano -aunque esta vez cantan en inglés y su estilo no conserva nada del clásico prog itálico-. Ya lo habíamos posteado, pero creo que algunas cosas merecen revisarlas nuevamente, me refiero a darle una nueva visión al tercer álbum de una gran agrupación llamada Not a Good Sign, compuesta por músicos increíbles y donde además participa el genio de David Jackson (ex miembro de la VDGG) tocando la flauta y el saxo. Una recomendación antes de empezar a escuchar este disco, solo tienen que renunciar a su concepto convencional de melodía y dejar que por sus oídos penetren los conceptos musicales aquí expuestos, déjense llevar e incorporen la interpretación melódica única de estos tipos, les aseguro que el viaje los llevará por lugares insospechados y deliciosamente encantadores. Otro de los ejemplos de la sangre joven que revitaliza el progresivo italiano y el progresivo mundial, otra promesa (mejor digo, otra muestra de un excelente presente) y otra muestra de todo lo nuevo que se está cocinando por aquellos pagos. Un disco que personalmente me hipnotizó desde el primer momento en que lo escuché, otro impresionante trabajo de este 2018 y otro discazo super recomendado!!!
Artista: Not a Good Sign
Álbum: Icebound
Año: 2018
Género: Progresivo ecléctico / Rock progresivo italiano
Duración: 48:21
Nacionalidad: Italia

Este trabajo fue lanzado desde el prestigioso sello AltrOck (índice del alto grado de calidad que la banda trae bajo el brazo).
Not A Good Sign es una joven banda de rock ecléctico proveniente de Milán. Fundados en 2011, los tipos crean una música melancólica y colorida. Relativamente fácil de escuchar, pero las estructuras están compuestas por patrones rítmicos inusuales, acordes disonantes y mucho de ostinato y obbligato. Estas partes estructurales dan a la música de la banda cierto componente inesperado que todo buen oyente apasionado de este tipo de música espera encontrar cada vez que entra en contacto con algo nuevo. Sobre todas estas construcciones maravillosas, se establecen colchones melódicos y aberturas instrumentales de alto impacto emocional.

Si bien su estilo se aleja del clásico progresivo italiano, debemos decir que también están muy lejos de la escuela británica progresiva, y más bien se acercan más al sonido de las agrupaciones nórdicas, incluso al escucharlos por primera vez y sin tener referencias de ellos, pensé que serían noruegos, belgas o suecos, ya que recuerdan a las estructuras complejas de King Crimson pero con mucho Avant Prog y RIO aunque como si fueran interpretadas por Änglagård o Anekdoten... ¿Se imaginan algo así?.

El nombre del grupo "no es una buena señal" es su reflejo de su compromiso por los temas ecológicos y los problemas climáticos globales. El estado de ánimo que transpiran es a menudo melancólico, paranóico y desesperado, pero también tienen momentos muy pesados, otro de los elementos que también los acerca a King Crimson, pero atención que esto es demasiado ecléctico como para poder resumirlo tan fácil, ya la primer canción parece salida de una versión moderna de la Mahavishnu Orchestra. Pero más allá de la sonoridad que le imprimen a su música, lo que vale es que el resultado es absolutamente maravilloso, cautivante, mágico y embriagador. Otra gran muestra de progresivo moderno, inteligente y talentoso, y otro discazo super recomendado por el blog cabezón.


Algunos de momentos del disco son breves momentos etéreos, mientras que los otros son canciones complejas y largas. Es difícil decir cuál es mejor... digamos que son diferentes, que tienen muchos estilos danzando alrededor de su música, meten muchas texturas impecables y que todo está perfectamente cohesionado y homogéneo.
Interpretaciones melódicas delicadas y potentes (a veces las dos cosas juntas), patrones rítmicos asesinos de la poderosa pareja en la base, bellas secciones cantadas se alternan con increíbles momentos de guitarra y teclado, un piano de alta sensibilidad crea aberturas instrumentales de alta intensidad y sensibilidad. Todo ello decorado con la gran voz y otro elementos anexos, como los sonidos del violín o el saxo de David Jackson.
El álbum se abre como una poderosa canción bien a lo Mahavishnu Orchestra llamada "Second Thought". Y... ¡Guauu! ¡Qué apertura! Luego se convierte más en un Avant / RIO. Impresionante desde el inicio. Le sigue "Frozen Words" que con sus 7 minutos tiene tiempo para secciones de piano que abre el tema antes de que la banda se una con una especie de balada espacial que en mitad del tema pasará a una sección instrumental de jazz-rock muy dinámica mientras se distribuyen un montón de capas de voces y sonidos para que luego vuelva la calma ya que el delicado violín y la guitarra acústica, que proporcionan los únicos sonidos, que no duran demasiado tiempo porque vendrá el final bien pesado y acelerado, en una muestra de cómo múltiples elementos pueden fusionarse sin problemas y con el mejor de los resultados.
"Hidden Smile" un instrumental de casi diez minutos que contiene algunos riffs bastante "convencionales" dentro del estilo de la banda, y donde el violín también tiene la oportunidad de brillar. En el octavo minuto la música produce una delicada desaceleración con un resultado encantador. Luego un pequeño instrumental de un minuto ("As If") sirve para meter climas y texturas, y da paso a "Down Below" con un notable trabajo en la voz, su sección introductoria es seguida por una tramo instrumental muy sólido y atractivo, y luego otra vez por la actuación vocal maravillosamente adaptada y perfeccionada. Otro tema muy bien construido y realizadoy una de las mejores canciones del disco para mí, que culmina con un delicado instrumental muy emocional para el último minuto.
"Truth" (7:13) se abre con muchas capas llenas de delicadeza y sutileza, que abrirá un paisaje sonoro que deja espacio a la breve pero brillante actuación vocal. Se produce una sección instrumental muy al estilo canterburiano sobre solos de guitarra (notable trabajo de la batería, no deboi olvidar de mencionarlo). Hacia el final del quinto minuto las cosas cambian pero siguen siendo pesadas; este tema tiene un estilo muy Van der Graaf Generator que lo hace absolutamente encantador. Le sigue el minuto y medio de "Not Yet" donde la base crea ritmos impares sobre los que se apoyan las líneas de teclas antes de que toda la banda estalle en una bella melodía. Este tema termina antes de que le hayan sacado todo el jugo y podría haber continuado, por lo que te quedarás con ganas de más. Por suerte el disco no termina aquí y todavía hay tiempo para que te sigas sorprendiendo.
"Trapped In" dura unos diez minutos, otra vez se usa un paisaje sonoro muy a lo Van der Graaf Generator , con el protagonismo de una voz quejumbrosa acompalada de coros femeninos que lo respaldan. Los cambios dinámicos van desde lo pesado a lo suave y ominoso están muy bien ejecutados y diseñados. Esta es una canción muy poderosa y en la que me encanta el suave interludio en el cuarto y el quinto minuto, seguido por el saxo de David Jackson. Delicioso y contundente. Y vamos terminando el disco con "Uomo Neve", canción corta de dos minutos y medio que se abre con el piano antes de pasar a una sección casi espeluznante, con muchas voces en un caos controlado y casi demente, se cierra con un regreso para desvanecerse con el piano de la abertura. Y así se cierra una obra maestra muy de estos tiempos, y notamos a una banda compuesta por notables compositores que a la vez son intérpretes con mucho talento, esta sólida banda tiene mucho para ofrecernos en el futuro así que hay que estar muy atentos a cada paso que den!

Para ir cerrando: "Icebound" es un álbum muy agradable e inspirado y la banda demuestra que son capaces de encontrar nuevas soluciones musicales únicas manteniendo intacto su potente y dinámico sonido tan personal. Un disco excelente que no puedo dejar de escuchar diariamente, será así hasta que me lo conozca de memoria, pero este tipo de cosas siempre son recurrentes, así que espero seguir escuchando este disco muchas veces a lo largo de mi vida.
Cerramos con el review siempre oportuno de nuestro eterno comentarista involuntario de siempre, que tiene las siguientes palabras sobre este disco:
Una excursión a los grandes nevados del rock progresivo con NOT A GOOD SIGN
Hoy nos toca presentar (y lo hacemos con mucho gusto) el nuevo trabajo del grupo italiano NOT A GOOD SIGN, el cual se titula “Icebound” y fue publicado de forma independiente por la propia banda en el 5 de mayo del presente año 2018. La alineación que estuvo a cargo de crear y grabar el nuevo material contenido en este disco consiste en Paolo “Ske” Botta [teclados y glockenspiel], Alessio Calandriello [voz], Alessandro Cassani [bajo y voz], Martino Malacrida [batería y trompeta] y Gian Marco Trevisan [guitarras y voz]. Ya no está aquí el guitarrista Francesco Zago ni tampoco el vocalista Alessio Cassandriello pero el ensamble está dispuesto con todas las energías en su poder para dignificar el estupendo legado que se ha plasmado en la secuencia de los dos discos precedentes “Not A Good Sign” y “From A Distance” (del 2013 y del 2015, respectivamente). El quinteto ha contado con invitados especiales a lo largo del disco, quienes han ayudado mucho a completar el bloque sonoro que se tenía en mente para cada ocasión. El nombre más notable en la lista de invitados es el de David Jackson, el legendario exintegrante de VAN DER GRAAF GENERATOR, quien tocó saxofones y flauta en la penúltima canción del álbum; pero también cabe mencionar a Eloisa Manera (violinista en nada menos que seis temas del álbum), Margherita Botta (glockenspiel de juguete y voz en las dos primeras canciones), Marcello Marinone (tímpanos en el tema #7) y Fabio “Ciro “ Ceriani (percusiones y efectos de sonido en cuatro temas). “Icebound” no es exactamente conceptual en torno a una narrativa pero sí está temáticamente centrado en la imagen metafórica del hielo como símbolo de soledad, aislamiento, incomunicabilidad o apatía, dependiendo de la canción. Todas las piezas contenidas en este álbum han sido compuestas por Botta excepto una, que fue concebida por Trevisan; veamos ahora los detalles del repertorio.
La dupla de ‘Second Thought’ y ‘Frozen Words’ da inicio al disco instaurando una energía expresiva inapelable y muy reveladora. El área sonora de ‘Second Thought’ se instala sobre recursos diversos anudados por una delirante garra común tras unos segundos iniciales marcados por un dadaísmo etéreo: una vez que estalla todo, los fuegos artificiales sónicos se apoderan de la atmósfera expansiva a través de los sofisticados vericuetos rítmicos que salen al paso. Una electrizante obertura que prepara cabalmente el terreno para el arribo de
‘Frozen Words’, una canción patentemente orientada hacia lo ceremonioso dentro de un encuadre signado por un elegante dramatismo, especialmente en lo referente al preciosista manejo de las capas y ornamentos de los teclados así como en los solos de guitarra ubicados estratégicamente en varios lugares. Los cambios de ritmo y ambiente que tienen lugar (incluyendo un pasaje de corte funky-jazz) se van sucediendo en una cohesionada ingeniería típicamente progresiva: los aires de familia con LA COSCIENZA DI ZENO, UNREAL CITY y LA MASCHERA DI CERA están a la orden del día. El primer momento decisivamente épico del disco llega de la mano de ‘Hidden Smile’, canción que dura poco más de 9 minutos y cuya estructura general consiste en una ágil sucesión de momentos serenos y otros opulentos. La primera sección melódica es sobria y romántica bajo la guía de la guitarra, derivando todo hacia otra sección más tensa donde el viraje sincopado de la dupla rítmica y los sombríos arreglos de los teclados obligan a la guitarra a incrementar su punche; en este momento, la cosa se sitúa a medio terreno entre ARENA y THRESHOLD, pocas veces se ha puesto la gente de NOT A GOOD SIGN en una actitud tan amigable con los estándares del prog-metal melódico. Poco antes de llegar a la frontera del cuarto minuto y medio, el bloque instrumental capitaliza el vigor reinante y dispone de un groove más trepidante para la dupla rítmica: los fraseos del violín sirven para pintar colores intermedios entre los aportes sonoros de la guitarra y de los teclados. Ya para el último tercio de la presente pieza, el desarrollo temático oscila entre lo sombrío y lo evocativo, siendo así que este segundo factor guarda un cariz patentemente romántico, muy en línea con el estándar Genesiano y el paradigma Cameliano. Como dijimos antes, tenemos aquí un despliegue de maniobras musicales signadas por un imponente talante épico.
Los 58 segundos que ocupa la miniatura ‘As If’ están penetrados por una etéreo fulgor mágico bajo la guía del piano, lo cual abre la puerta a la emergencia de ‘Down Below’, canción que expone varios pasajes desbordantes de pathos que vibra entre la sombra y la luz. El desarrollo temático coge la posta de etérea serenidad recibida del breve instrumental precedente pero luego se desvía hacia un cuerpo central rebosante de punche rockero, un punche que se deja empapar por los señoriales aires sofisticados que emanan de la razonablemente compleja estructura melódica que se dirige desde el encuadre de los teclados y la batería para dar forma a los riffs de guitarra y las intensas líneas del violín. La extravagante coda tiene en sus arreglos de sintetizador un inconfundible aire Floydiano (etapa 73-75). ‘Truth’ cumple con la misión de retomar el legado Genesiano en confluencia con la médula aggiornada que se inspira tanto en la escena retro-progresiva italiana que late y vive desde los 90s como en el paradigma neo-progresivo del nuevo milenio. Incluso en los momentos más aguerridos, se nota que reina ahora la claridad melódica y no tanto la densidad emocional como había sucedido en ‘Down Below’. Tal vez se podría describir a
‘Truth’ como el microcosmos de ‘Hidden Smile’. Con la dupla del breve ítem ‘Not Yet’ y la ambiciosa canción ‘Trapped In’ – ocupando un espacio de casi 9 ¾ minutos, es la más larga del repertorio –, el grupo se compromete a plantear el último momento de magnificencia épica del disco. ‘Not Yet’ es un prólogo típicamente prog-sinfónico que sigue en buena medida el estándar de CAMEL con algunos rezagos de los PFM mientras que ‘Trapped In’ le da un nuevo giro de tuerca al juego de modalidades diversificadas de la esencial musicalidad del rock progresivo. La ilación de diversos motivos y las variaciones de ambiente están a la orden del día en una suerte de síntesis entre el apasionamiento denso de ‘Down Below’ y la majestuosidad frontal de ‘Hidden Smile’. Hay ciertos pasajes que suena bastante Crimsonianos y allí están los saxos de Jackson para potenciar debidamente la aureola de tortuosa oscuridad que se explaya en momentos así. La última sección es más animada y luminosa, siendo así que los pasajes de teclado se tornan Emersonianos y los guitarreos van por la línea de Steve Howe: así las cosas, el ilustre invitado Vandergraffiano se sitúa en un posicionamiento lírico desde el cual llena espacios aludidos por las capas de teclado rumbo al drástico golpe final. Chocante pero efectivo esta final de canción.
El epílogo del álbum está encarnado en la pieza de 2 ½ minutos ‘Uomo Neve’, la cual comienza con espartanos fraseos de piano y termina con lánguidas capas de sintetizador que apuntan hacia una nocturnidad mustia y lánguida, tal vez el inicio de una nueva calma... o tal vez un momento final tras el cual el mundo no tiene más remedio que desaparecer. Como sea, se trata de un final interesante tras los variados despliegues de intensidad caleidoscópica que se nos ha ido mostrando en ‘Down Below’, ‘Truth’ y ‘Trapped In’. Como un todo, más allá de los momentos individuales favoritos que cada oyente pueda escoger,
“Icebound” funciona con total efectividad: el renovado personal de NOT A GOOD SIGN ha sabido dignificar al 100% la vitalidad de su obra integral mientras añade nuevos bríos y renovado vigor a los esquemas sonoros planteados y registrados en este nuevo disco. De lo mejor que se nos está dando en el área sinfónica del rock progresivo del año 2018.
César Inca
Pueden escuchar esta belleza en su espacio en Bandcamp, créanme que le tienen que dar una oportunidad, me lo van a agradecer eternamente:
https://notagoodsign.bandcamp.com/album/icebound

Lista de Temas:
1. Second Thought
2. Frozen Words
3. Hidden Smile
4. As If
5. Down Below
6. Truth
7. Not Yet
8. Trapped In
9. Uomo Neve
Alineación:
- Alessio Calandriello / Vocals
- Gian Marco Trevisan / guitar, vocals
- Paolo "Ske" Botta / keyboards, glockenspiel, mixing
- Alessandro Cassani / bass, vocals
- Martino Malacrida / drums, trumpet
With:
Fabio "Ciro" Ceriani / percussion & sounds (2,3,5,6)
David Jackson / saxes & flute (8)
Eloisa Manera / Violin (1-5,8)
Margherita Botta / toy glockenspiel & voice (1,2)
Marcello Marinone / timpani (7), producer