La línea convencional Madrid-Villalba-Segovia volverá a recuperar el sabor de las décadas de los 70 a 90 con la vuelta a las vías de la composición histórica 440-096. Esta veterana unidad, que fue restaurada con sus colores y asientos originales, vuelve a ser el soporte de una oferta turística validada con el éxito la pasada temporada otoñal. La Asociación de Amigos del Ferrocarril de Madrid pilota este tren, con la colaboración de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles y la Dirección de Viajeros de Renfe Operadora, así como el propio Ayuntamiento de Segovia.
Serán seis los sábados de esta primavera en los que circulará el tren, combinando tres factores de atracción. Por un lado, el circular en un tren histórico, que recupera una forma de viajar distinta, aquella en la que incluso se podían bajar las ventanillas. Por otro lado, el viaje, recorriendo uno de los espacios naturales más valiosos de las comunidades de Madrid y de Castilla y León: la Sierra del Guadarrama, declarada hace pocos días Parque Nacional. Finalmente, el destino: Segovia. Esta capital castellana atesora un patrimonio monumental romano, románico, gótico… combinado con una oferta de actividades culturales y gastronómicas.
Los viajeros recibirán a bordo del tren información sobre esta oferta cultural y culinaria de la ciudad, y podrán adquirir la Tarjeta de Amigos de Segovia, que da derecho a descuentos en gran variedad de establecimientos. En el billete se incluye el traslado en autobús al centro, donde los viajeros dispondrán de todo el día para disfrutar la ciudad antes de regresar en tren a Madrid.
La asociación ha restaurado y mantiene en funcionamiento el tren empleado, la UT440.096, que luce exterior e interiores originales. Este vehículo es el único superviviente intacto de la serie 440, emblemática de de los servicios de Cercanías y Regionales de toda España desde su introducción a mediados de los años 70.
Con suspensión neumática y velocidad máxima de 140 km/h, estos trenes, producto de la industria nacional, se ganaron un lugar en la memoria de todos los usuarios, que utilizaron estos servicios en sus desplazamientos cotidianos.
La primera temporada, el año pasado, incluyó cinco viajes en otoño con una ocupación media del 70 por ciento y plena viabilidad económica. Los precios se mantienen este año, con una tarifa general de veinte euros y descuentos para familias (cuatro billetes por sesenta euros).
Fuente: Vía Libre (www.vialibre-ffe.com)