Novedad: novelas cortas de D. H. Lawrence

Publicado el 02 diciembre 2010 por Duermevela
Nocturna Ediciones recopila tres novelas cortas de D. H. Lawrence, escritas entre 1920 y 1921.
D. H. Lawrence
El zorro y otras historias
€ 15,00
Traducción de Francisco Torres Oliver
380 páginas
Encuadernación: Rústica con solapas
ISBN 978-84-938013-2-8
En la primera de ellas, «La mariquita», un conde y oficial alemán se encuentra hospitalizado en Inglaterra al borde de la muerte por su participación en la Primera Guerra Mundial. De carácter siniestro y misterioso, pronto empieza a recibir las visitas de una joven que, aunque repelida por su oscuridad, no puede dejar de verle. En la segunda, «El muñeco del capitán», una pintora y marionetista crea un títere de su amante tan fiel que, cuando la mujer de este lo descubre en su tienda, trata por todos los medios de conseguirlo. Por último, en «El zorro», historia en la que se basó la primera película de Mark Rydell, dos mujeres que viven aisladas en una pequeña granja abren un día la puerta para toparse con un joven soldado británico que resulta ser tan astuto como un zorro. A partir de ese momento, la relación entre ambas da un vuelco que culminará en un final inesperado.

Críticas:
«D. H. Lawrence fue el novelista más grande e imaginativo de nuestra generación».
E. M. Forster
D. H. LAWRENCE
DAVID HERBERT LAWRENCE (Eastwood, Nottinghamshire, Inglaterra, 1885 — Vence, Francia, 1930) se trasladó en 1908 a Londres, donde, dos años después, publicó su primera novela, El pavo real blanco, y conoció a Frieda Weekley, una mujer casada y de origen alemán, con quien compartiría el resto de su vida. Al comienzo de la Primera Guerra Mundial, contrajeron matrimonio, pero con la guerra, y a causa del origen alemán de ella y de su antimilitarismo, atravesaron muchas dificultades: su novela Arco iris (1915) [cuya historia luego proseguiría en Mujeres enamoradas (1920)] fue censurada por ser considerada obscena y acusaron al matrimonio de espionaje. Acabada la guerra, Lawrence comenzó un exilio voluntario que le llevó a diversos países, entre otros México, donde contrajo malaria y tuberculosis, y tuvo que regresar a Europa. Se estableció cerca de Florencia, donde terminó El amante de Lady Chatterley. A su muerte, Aldous Huxley, con quien mantuvo una larga y profunda amistad, publicó una recopilación de sus cartas.