Las siestas de Polly de Peter Newell
La pequeña Polly adora las siestas. No importa que esté sentada en su silla, tumbada en la hierba o tocando el piano, irresistible, el sueño siempre llega. Muchos piensan que Polly es una chica perezosa. Pero están equivocados. Polly está despierta, muy despierta. Y pronto descubrimos que sus ojos se cierran para ver mejor. Polly corre increíbles aventuras entonces, pobladas de arañas gigantes, naipes que cobran vida o vacas que la persiguen por los prados. Una auténtica obra maestra del cómic de principios del XX que se presenta en un formato de coleccionista.
Ficha del libro