EL MUNDO DEL MAÑANA
Los sobrevivientes del Apocalipsis intentan rescatar lo que pueden en medio de una civilización devastada. De nueva cuenta Penryn se ve envuelta en una peligrosa confrontación que la llevará al corazón mismo del enfrentamiento entre ángeles guerreros. En una ciudad de calles vacías y desolación, la protagonista vuelve a encontrar a Raffe, el ángel que ha perdido sus alas y que intenta recuperarse. Sin sus alas no puede unirse a sus congéneres y no puede ocupar su lugar como uno de sus líderes.
BLACK OUT
¿ES POSIBLE DETENER EL CAOS?Milán, viernes 1 de febrero. Un semáforo se avería repentinamente, causando un atasco en cadena y múltiples accidentes. Mientras desciende de su vehículo para comprobar qué ha sucedido, Piero Manzano, joven analista informático, se da cuenta de que toda la ciudad está a oscuras. En el transcurso de pocas horas, un blackout eléctrico afecta a toda la península italiana y empieza a propagarse por toda Europa: Suecia, Alemania, Francia, Austria, Bélgica y Holanda están a oscuras. El continente se está apagando. Piero, está seguro de que no es un fallo local. Cuando se pone en contacto con las autoridades, le acusan de ser el culpable: alguien se ha introducido en su cuenta de correo y enviado mails comprometedores. El verdadero responsable ha intentado dejar fuera de juego a la única persona capaz de acabar con sus planes. Mientras la situación en las calles, está tornándose dramática, y con varias plantas nucleares en situación crítica y amenazando la seguridad de millones de personas, Piero está decidido a probar su inocencia, aunque tenga que atravesar la noche de Europa.
Una seductora novela de fantasía y aventuras situada en un país imaginario llamado Zombay. Allí, un chico se escapa de la casa para niños huérfanos en la que vive y se une a una compañía de teatro de duendes para encontrar a su hermano desaparecido. Muy pronto comienza a participar como actor en piezas teatrales. Pero estas obras no son sólo para el entretenimiento, y las máscaras que utilizan los actores son más que una fantasía. Según Mary Quattlebaum, de The Washington Post, “William Alexander construye su primera y atmosférica novela en actos y escenas, en lugar de capítulos, y emplea el elíptico idioma de los viejos cuentos de hadas.