Jason Segel y Kirsten Miller nos presentan un libro lleno de amor, amistad, valores y muchas, pero muchas pesadillas. Charlie Laird, un niño con la piel del color de la leche cortada y oscuras ojeras, vive en un pueblo llamado Cypress Creek con su hermano menor Jack y su papá, Andrew Laird. Hasta hace tres meses todo parecía normal, pues Charlie podía dormir tranquilamente. Hasta que su papá conoce a Charlotte DeChant y se casan. Ahora se tienen que mudar a la mansión purpura en la cima de DeChant Hills y las cosas comienzan a cambiar.
Charlie sufre ahora terribles pesadillas, por lo cual ha decidido que no volverá a dormir. Además, últimamente ha escuchado ruidos en la mansión y presiente que su madrasta es una bruja, motivo por el cual comienza a llamarla Brujastra. Esto hace que Charlie utilice cualquier cosa para bloquear todas las entradas a su cuarto, ya que tiene miedo de que su Brujastra le quiera hacer daño. Conforme pasan los días, las pesadillas de Charlie se vuelven más reales y siente que pronto terminarán por capturarlo. Charlie les cuenta a sus amigos (Alfie, Rocco y Paige) sobre lo que piensa de su Brujastra, pero ellos aseguran que su madrasta parece ser una buena persona. Incluso su hermanito Jack demuestra cariño por ella. Pero Charlie está dispuesto a descubrirla cueste lo que cueste.
Pero un suceso hará que Charlie se adentre en lo más profundo de sus pesadillas y lo que encontrará ahí lo dejará completamente sorprendido. Tomará una decisión importante: luchar contra sus miedos más profundos para poder encontrar la tranquilidad con la que antes vivía. Esto no será posible sin la ayuda de sus inseparables amigos.
Fuego es la segunda entrega de la saga Engelsfors. La primera fue El Círculo en donde conocimos a un grupo de chicas con poderes especiales. Ellas son las Elegidas y mantenerse unidas en contra del mal es su salvación. Engelsfors es el nombre de la pequeña ciudad industrial en la cual ocurren las acciones de la novela. Cada una de las Elegidas probará sus poderes y participarán en una batalla campal entre el bien y el mal.
En Fuego, el Apocalipsis está cada día más cerca y el Consejo está temeroso así que empieza a protegerse de todos. Las Elegidas (Minno, Anna-Karin, Ida, Linnea y Vannesa) ya concen su destino, el cual consiste en evitar el Apocalipsis, pero no tienen idea de cuando llegará y tampoco están preparadas para enfrentarlo. Mientras tanto, el Consejo inicia el jucio de Anna-Karin debido a que usó sus poderes indebidamente. Las Elegidas tendrán que mantenerse unidas para apoyar a su compañera y rescatarla de un terrible castigo. Asimismo, Viktor y Alexander son enviados por el Consejo para vigilar a las Elegidas todo el tiempo mientras ellas continúan aprendiendo a controlar sus poderes.
En este libro aparece el grupo Engelsfors Positivo, que se disfraza como un equipo de superación personal y gana la simpatía de muchos. Los líderes son los padres de Elias que como se recordará murió en el libro 1 de la saga. Su poder de convicción es tan fuerte que recluta a muchas personas hasta convertirse en una especie de secta. Cuando las Elegidas se enteran, sospechan que una magia oscura y poderosa está detrás de todo y tendrán que detenerla. Las vidas de Ida y Linnea se presentan de una forma que fascina. Ida es, como siempre, la más popular pero sigue sin integrarse por completo a las Elegidas y Linnea es hija de un papá alcoholico, vive sola y es mantenida por el Estado. Sus historias ocupan parte importante del libro con lo cual se logra conocerlas mucho más. En Engelsfors existe oscuridad y terror. La intriga y la magia hace que Fuego sea emocionante. Sin duda es una de las mejores segundas partes que existen.