Volpi
Nueva lista.
Simplemente novelas cortas, de no más de 130 ó 140 páginas .Para la cartera de la dama . Tanto en tan poco.
Terrible novela acerca del horror. En tiempos de guerra, en un país europeo que podría ser la Alemania nazi, se recluta a 500 ancianos para formar un batallón de reserva con una misión atroz. Así como la misión se concreta en el bosque, afloran los cuentos tradicionales europeos, pero en forma de pesadilla, sin final feliz. Y el panadero asesina, el zapatero asesina y el asesino también asesina. ¿Y el lector? ¿Y si también es reclutado, y tampoco se niega a asesinar? No es fácil.
La metafísica de los tubos. A. Nothomb.
Nothomb escribió muchas buenas pequeñas novelas. Esta en particular tiene uno de los mejores comienzos que recuerdo haber leído. Planteos existenciales a cargo de una recién nacida como para alquilar balcones.
14. J. Echenoz.
Una historia corta, simple, que atraviesa y pinta la irrupción de la Primera Guerra mundial en la vida de un tipo como cualquier otro. Con un tono irónico y un narrador que varía la distancia y, a pesar de la escasa longitud de la novela, cuenta el horror de la guerra de trincheras a partir de detalles: los animales en el campo de batalla, por ejemplo. Un final contundente que en cinco líneas te da vuelta la página.
Terrible. Lo primero que leí de F.V. y lo único que realmente me gustó. Escribe siempre en primera persona, y en las otras novelas que leí de él, el personaje queda repetido. Pero ésta, es una historia que te conmueve, te crispa, te caga a palos. Con un humor para lo terrible que hasta da un poco de culpa.
La casa de papel.. C.M. Domínguez.
Editado primero como el primero de varios cuentos (varios de ellos incluidos como capítulos de la novela Tres muescas en mi carabina), y luego como nouvelle. Historia con algo de intriga y mucho de amor obsesivo a los libros. Buenísimo.
Presagio de carnaval. L. Bodoc.
Conmovedora historia de amor entre un vendedor de yuyos y una chica de clase media, en el marco del carnaval jujeño. Tragedia anunciada desde las primeras líneas.
La sierva.. A. Rivera.
Trenes rigurosamente vigilados. B. Hrabal.
Un pueblito durante la ocupación nazi, con estación de ferrocarril. Pasan trenes que trasladan armas hacia el frente. Un adolescente narra la historia que inicialmente parece cándida, plagada de personajes pintorescos. La trama cambia. El narrador también.
El narrador es un buen escritor sin éxito, que emprende un viaje por Uruguay en búsqueda del desconocido autor de una gran novela inédita. Excelente, con mucho humor.
La balada del café triste. C. Mc.Cullers.
Libro de belleza desoladora, dice la reseña. Creo que es el mejor libro de amor-un amor triste, desigual y de oscuros designios- que leí. Alguna edición debe poder conseguirse, al menos usado o en la web.
La vida privada de los árboles. A. Zambra.
Qué pequeño ciclomotor de manillar cromado en el fondo del patio. G. Perec.
Un grupo de amigos intentando que un pariente de uno de ellos zafe de ser enlistado para ir a la guerra en Argelia, es la excusa de Perec para hacer miles de juegos de palabras. Perec juega y el lector se divierte.
Al punto que termina con un "Índice de las flores y los ornamentos retóricos y, más exactamente, de las metábolas y las parataxis que el autor cree haber encontrado en el texto que acaba de leer."