¡Toma, toma y toma! Que tenía yo unas dudas horribles sobre si era aconsejable volver a escribir otra entrada sobre el escocés C. Duncan, que una cosa es haber recibido “Architect” en casa (acompañado del correspondiente EP de edición limitada: es lo que tiene ser tan fan y haber reservado en preventa, jejeje) e inmediatamente comprobado que su excelso contenido está a la altura de las expectativas, y otra bien distinta andar dando la barrila al personal, una y otra vez, cuatro posts ya para un tío que apenas acaba de debutar…
Pues bien, he aquí una noticia que me ha puesto en pie, de apenas hace unas horas: ¡C. Duncan, nominado al prestigiosísimo (para uno que hay que sí que vale la pena) Mercury Prize! ¡JO-DER, cómo me alegro! ¡Menuda sorpresa!
Así que voy -vamos- a celebrarlo como esta música exquisita se merece: ahí os dejo esta canción (un maravilloso lamento de inspiración atlántica titulado “Novices“) también incluida en el disco, y que como sucedía con “Here To There” constituye una muestra fehaciente de las cosas prodigiosas que ocurren cuando de verdad se tiene talento ¡Te lo mereces, Christopher Duncan!