Autor: Annabel Pitcher
Editorial: Alevosía
280 páginas
Precio: 16,95 €
eBook: 9,99 €
Sinopsis
Zoe es una chica inglesa de quince años que oculta un terrible secreto. Llena de angustia pero también con una buena dosis de humor, Zoe comenzará a escribir cartas a un criminal llamado Stuart Harris, encerrado en el corredor de la muerte de una prisión de Texas. Piensa que solo alguien así, marcado al igual que ella por el secreto, la mentira y el asesinato, va a poder comprenderla...
Bolígrafo en mano, Zoe respira profundamente, come un sándwich de mermelada de fresa y comienza su relato de amor y traición...
Me quedé con muchas ganas de leer la anterior novela de la autora, Mi hermana vive sobre la repisa de la chimenea, de la cual leí en su día excelentes críticas; posiblemente antes o después termino por leerla. Y la suerte quiso que me estrenara con Pitcher con esta otra novela, Nubes de Kétchup, que, si bien no me ha disgustado, no ha sido la historia que me esperaba.
Zoe es una adolescente que siente el peso de la culpa sobre sus espaldas de tal modo que empieza a escribirle cartas a un convicto al que no conoce de nada, simplemente decide enviarle cartas contándole su historia para desahogarse, pues Zoe siente que su situación se asimila mucho a la del Sr. Harris, condenado a la pena de muerte por asesinato, pues cree que solo él puede entenderla. Y es así como a través de esas cartas Zoe empieza a explicar su historia, ese terrible secreto que la atormenta.
La historia así contada promete mucho, al menos eso me hizo pensar, sin embargo debo decir que he encontrado en esta novela más de romántico que no de la historia dramática que me esperaba. La relación de Zoe con los hermanos Morgan es el eje principal de la novela. Los personajes están muy bien conseguidos, tanto principales como secundarios creo que están perfectamente descritos, si bien no he conseguido empatizar con ninguno de ellos.
La narración me ha resultado muy ágil en algunos momentos y algo aburrida en otros, confieso que en alguna ocasión he leído alguna página en diagonal. Y sobre todo el final no ha sido para nada lo que me esperaba y, aunque ya creía intuir por donde iban los tiros, no me ha sorprendido nada y no ha terminado de gustarme. Me ha parecido una novela quizás para un público juvenil, mis expectativas eran muy altas y me he quedado un poco a medias. Es un libro bien escrito, con personajes bien elaborados y una historia entretenida.