Tenemos que comenzar a pensar de otra manera pues a los nuevos problemas no se les puede aplicar las viejas recetas. Un ejemplo, hace más de cincuenta años una astrónoma: Vera Rubin, descubrió que todas las estrellas de una galaxia lenticular, como la Vía Láctea, todas, viajan a la misma velocidad. Ya sean las más antiguas o las recién nacidas, ya sean enanas o supermasivas, todas las estrellas van a la misma velocidad; como eso contradice las Leyes de Newton no lo pasaron a creer y la despreciaron. Como ella siguió insistiendo con sus cálculos y averiguaciones los científicos comenzaron a hablar de una "materia oscura" y que si patatín y que si patatán. Negándose a ver lo evidente: a nuestra mirada las estrellas parecen fijas, ¡porque van a la misma velocidad! Todas. ¿Lo entendemos?
Todas las estrellas que nacen dentro de una galaxia como la de la foto, desde el mismo momento de su nacimiento hasta su extinción, mantendrán su posición relativa al centro galáctico. Y con ellas sus planetas, habitados o no.
Mirar que simple es cuando lo comprendes: la estrella Vega está a seis años luz de distancia, seis años por delante, si observamos esa estrella podremos saber por lo que pasará el Sol dentro de seis años, ¡así de simple! El Sol se encuentra en estos meses en su período de mínima actividad, dentro de seis años alcanzará su período de máxima actividad, ¿qué ocurrirá entonces? Podemos predecirlo con cierta fiabilidad observando ahora mismo a Vega. Y esto será así por los siglos de los siglos pues la velocidad de traslación de las estrellas es siempre la misma.