Nuestros niños y niñas tienen derecho a vivir en un mundo más feliz.
Tienen derecho y deben aprender a amar y a saber perdonar, a conocer la gratificante y enriquecedora experiencia que uno siente cuando se practica el esfuerzo, la constancia, el valor que precede al éxito.
Nuestros niños y niñas tienen derecho a aprender porque es bueno compartir. Tienen derecho a saber lo gratificante que es ayudar a otras personas.
Tienen derecho a crear y a vivir en una sociedad donde prime la tolerancia.
Creo firmemente en los valores, en el amor, creo en la importancia de los masajes en nuestra vida diaria, porque nos permite acercarnos a la otra persona, nos permite a través del tacto percibir cómo se encuentra esa persona de tensa o cansada y con nuestras manos y nuestro cariño, podemos hacer que ese cansancio desaparezca y aparezca el relax, el descanso, la paz.
PLAYTER es mi contribución a una mejora educativa de nuestr@s niñ@s.