Nueva etapa, nuevas satisfacciones

Por Corderobeatriz

Hace mucho quería escribir sobre esta nueva etapa que estamos viviendo en casa.

Con Daniela estamos iniciando Operación adiós pañal, ahora que ya tiene mas de 2 añitos, creemos que es el momento. Dare más detalles sobre el proceso en otro post. Por ahorita vamos lento pero seguro.

Bobby ya tiene casi 8 meses, y desde los 6 ha venido despertando poco a poco, evolucionando cada día más y sin darnos cuenta, ya es un bebé dinámico, juguetón y muy conciente de lo que pasa a su alrededor.

El sábado pasado fue el día en que me di cuenta que estamos en una nueva etapa con ambos. Por la mañana, cuando nos preparábamos para salir, de repente Daniela me miró y dijo: mamá pupu. Me quedé paralizada, no sabía qué hacer.

Era la primera vez que por voluntad propia avisaba que quería ir al bañito. Por un momento dudé, así que le pregunté si quería hacer, y me dijo que si. La tomé por la cintura y fuimos al baño. No se concretó nada, pero para mi es un gran avance, solo el hecho de avisar.

Más tarde, mientras compartíamos con otros bebés y papás en la Reunión de coches, evento organizado por Maternity Gym, Bobby comenzó a aplaudir!! Mi esposo y yo nos quedamos sorprendidos, yo me paralicé por un momento y dije: está aplaudiendo!. Con la misma cara pasmada miré a unos amigos que nos encontramos casualmente en el evento. Parecían no entender mi asombro pero sonrieron complacidos cuando vieron mi expresión de orgullo. Ya me entenderán cuando nazca su bebé.

Y es que con Bobby siento que todo va más rápido que con Daniela. No se si a todas las mamás nos pasa igual con los segundos bebés. Un día era un recién nacido, y ahora baila, aplaude, se sienta solo, ya llora cuando me alejo y pide ir al suelo a jugar con su hermana. Y lo más reciente, ya balbucea la palabra mamá!!

Es hermosa la etapa que cada uno vive. Daniela luchando por su independencia, aprendiendo cada vez más palabras; por su lado Bobby impresionado por el destello de luz del sol que entra por la ventada por las mañanas y comenzando a decir sus primeras palabras. Yo disfrutando cada segundo por partida doble!

Que lindo que con los hijos el aprendizajes es amor. Al verlos evolucionando de forma individual, pero al mismo tiempo juntos, no puedo dejar de pensar en todo lo que les falta por aprender y vivir. Además, es increíble ver como se van definiendo sus caracteres y perfilándose cada uno en su forma de ser, a pesar de ser hermanos.

Por eso es importante no compararlos ni esperar que el proceso de desarrollo sea el mismo. Incluso, la estimulación y juegos deben adaptarse a cada niño, ya que cada uno tiene sus habilidades y preferencias. Cada hijo es un diamante en bruto que aprendemos a pulir con amor.


Filed under: Mis hijos y yo