Siempre tengo crema de manos en mi mesa de oficina, es uno de los básicos de mi día a día, junto con el cacao para los labios. No pueda estar si ninguno de ellos.
Justo el otro día hablaba de las cremas de manos con Ana, nuestra mami de la oficina que se dedica a la limpieza de las mismas y que tiene las manos sequíiisimas y cuarteadas de tanto producto de limpieza, y a la que siempre le ofrezco un poquito de crema cada día que viene a nuestra ofi. Me decía que para ella, lo más importante es que la crema de manos hidrate y nutra a fondo pero, sobre todo, que se absorba rápido y no quede pegajosa ni con sensación grasa, como alguna que le he dado a probar y que no le ha gustado mucho en este sentido…
La semana pasada la sorprendí con la nueva Neutrogena de rápida absorción, la crema de manos famosa por su fórmula noruega que en su versión de rápida absorción es una crema ligera que nutre, protege y repara en un momento las manos secas y estropeadas, proporcionando una absorción inmediata y que facilita muchísimo su aplicación.
Entre sus componentes está la Glicerina (que nutre, repara y protege), la Vaselina (que hidrata y suaviza), la Vitamina E (que previene el envejecimiento) y el Pantenol (suaviza y calma). La clave de su rápida absorción está en la Dimeticona, la responsable de que la crema no deje sensación grasa en la piel.
El resultado de utilizar esta crema es excepcional, me comentó Ana que notaba muchísimo la diferencia con otras que hemos probado y lo cierto es que la suavidad es inmediata y la sensación es de cero grasa y nada de pegajosa, un 10! Y yo, que en la oficina estoy todo el rato aplicándome crema, he notado que con esta no necesito tantas aplicaciones y que no se me escurre el pilot entre las manos :)