El reporte de Patently Mobile explica que Samsung ha introducido una nueva tecnología para pulseras inteligentes que le permitiría colocar un sensor de huella dactilar en la propia banda del dispositivo, lo que permitiría a los usuarios poder desbloquearlo con algún dedo de la otra mano.
Además de agregar mayor seguridad a una futura Gear Fit, el objetivo de Samsung sería el de dotar de mayor inteligencia al wearable y para ello tendría funciones que podrían activarse solas según las mediciones que el dispositivo realice.
Así, dependiendo de la frecuencia del pulso la pulsera inteligente podría activar algunas funciones. Por ejemplo si detecta un ritmo acelerado y un mayor calor corporal podría ejecutar las aplicaciones de deportes. A esto se suma la necesidad de obtener ciertos patrones corporales para poder activar algunas funciones, lo que haría que el propio cuerpo humano sirva de barrera de seguridad.
La patente también indica que la próxima pulsera inteligente de Samsung podrá controlar objetos del hogar basados en el Internet de las Cosas como aires acondicionados, hornos, televisores y todo lo que esté conectado a la red doméstica.
Samsung también patentó un sistema de autenticación a través del iris que podría ser incorporado a unas gafas Gear VR o a otros experimentos de la compañía, y que permitirían la comunicación con otros dispositivos y la ejecución de tareas, entre las que destaca, una vez más, el control del hogar.
La empresa sudcoreana lanzó su última pulsera Gear Fit 2 en junio. Se trata de un dispositivo ergonómico con GPS, notificaciones de tu teléfono móvil y monitor de ritmo cardíaco, así como resistencia al agua.
Como es costumbre esto es solo una patente, y no significa que la compañía vaya a lanzar algún producto con las características que en ella se señalan, aunque desde luego, nos acercan un poco más a los planes de la empresa.