La historia de una familia en la Texas de los años 50 sirve de excusa para explorar desde una perspectiva filosófica el sentido de la vida como si de un cuadro impresionista se tratara. Mr. O’Brien, interpretado por Brad Pitt encarna la figura del padre autoritario y religioso que prepara a sus hijos para que se enfrenten a un mundo en el que sobrevive el más fuerte; Mrs. O’Brien, papel que interpreta de manera soberbia y sin casi diálogos Jessica Chastain, es la gracia, la belleza y la ingenuidad personificada, la que tratará de dar una educación basada en el amor. Una de sus escasas frases deja muy claro su papel:
The only way to be happy is to love. Unless you love, your life will flash by.
Quien nos guiará en toda la historia será la voz en off de Jack, el hijo mayor, que en su etapa adulta es interpretado por Sean Penn.
El árbol de la vida es una de las películas más ambiciosas de la historia del cine en cuanto a su exploración visual de algunas preguntas metafísicas tales como: ¿quiénes somos?, ¿de donde venimos?, ¿cuál es la relación del hombre con la naturaleza?. La narrativa deja paso a una estructura poética en la que la imagen por si sola trata de dar significado al mensaje.
Estamos ante una película arriesgada que depende del prisma a través del cual se mire puede ser considerado en ocasiones ridícula o grandiosa. Lo que no cabe duda es que se trata de una nueva forma de describir el universo a través del estilo particular de Terrence Malick.
La exquisita fotografía de Emmanuel Lubezki es inmejorable y nos deja pensando quien mejor que él podría hacer un retrato estilo polaroid de nuestras vacaciones familiares. Como puntos débiles quizá la excesiva duración de uno de los episodios de la película que parece extraído de un documental de la BBC sobre el cosmos, aunque se encuentre justificado por el planteamiento panteísta de su autor, y el papel recortado al máximo de Sean Penn cuyo enfado tras ver el montaje final encuentro justificado.
El árbol de la vida es una película magnifica en su retrato de la familia, inclasificable por su forma poética, y que sin embargo peca por su grandilocuencia y sectarismo intelectual.