A los 20 existentes (.com, .net, .org, .edu, .gov ...), les han salido cientos de pretendientes: ciudades, comunidades y marcas quieren tener su propio dominio en la Red. Parece ser que los dominios .gais o .familia .madrid y similares van a tener su espacio en la red. Podremos registrar www.adams.family o www.perezperez.familia, www.alfama.lisboa o www.barriosalamanca.madrid. Fue 2003, cuando se aceptó el .cat para la comunidad cultural catalana. Ahora Galicia (.gal), Euskadi (.eus) y León (.lli) aspiran a tener su propia extensión, así como las ciudades de Barcelona (.bcn), Madrid (.madrid), Valencia (.val), Paris, Berlín y Nueva York (nyc), entre otras. ¿Requisitos? desembolsar los 185.000 dólares que cuesta el estudio de viabilidad, ya que la ICANN no quiere extensiones de dominio muertos, sin dominios registrados.
Parece ser que con las marcas no va a haber liberalización. Así seguiremos teniendo www.apple.es y www.apple.com, en lugar de www.iphone.apple o www.tomate.apis.
Otro problema sería los diferentes caracteres y alfabetos nacionales. Desde finales de 2007 se permite el uso de la ñ, la ç o acentos en los dominios de internet (www.españa.es y www.españoles.es son dominios reservados no disponibles para particulares), aunque su uso plantean dudas, ya que no todos los teclados tienen estos caracteres. A estos caracteres especiales hay que añadir la dificultad de los alfabetos especiales (cirílica, hebrea, china o árabe).
Otras extensiones en el punto de mira son la .xxx (de la que hablaremos en el próximo post) y la de colectivos demasiado abiertos ¿Quién puede arriesgar 185.000 dólares en un estudio de viabilidad para la extensión .music, que tendría millones de dominios registrados, a sabiendas de que no iba a rentabilizarlos?alfonsovazquez.comciberantropólogo