Como bien sabéis, hace una semana aproximadamente, decidimos reclutar a nuevos talentos y futuras estrellas periodísticas del panorama ocio-digital.
El único requisito que pedíamos era que nos mandarais un artículo/texto con vuestras opiniones sobre las remasterizaciones de los videojuegos en HD. ¿Están totalmente justificados? ¿Se trata de tan sólo una medida recaudatoria?
Bien, ha llegado el momento que os mostremos a nuestros candidatos seleccionados, presentes colegas y futuros amigos. Y es que todos ellos, desde hoy, entran a ser parte de la historia Videojuegos y Consolas. Nos gustaría dar la bienvenida al primero de ellos, Fran Pinel, un apasionado de los videojuegos desde los tiempos de Mario.
Os dejamos con su más que interesante reflexión. Muchas gracias Fran y…¡Bienvenido a casa!
Remakes en HD
Artículo de opinión por Fran Pinel.
Todo jugón que se precie tiene una sensación de nostalgia al pensar en aquel clásico que le transportó a mundos mágicos, historias inolvidables, personajes icónicos… Cualquiera podría hacer un poco de memoria y rescatar del baúl de los recuerdos personal ese juegazo que nos mantuvo días, semanas, meses pegados a la pantalla experimentando cada gota de contenido y reviviendo una y otra vez las mismas grandes sensaciones. Inevitable es que a veces miremos estas joyas lúdicas pensando en que cualquier tiempo pasado fue mejor, y en como nos gustaría ver el juego de nuestras vidas resucitado, puesto a punto, explotando las posibilidades del hardware vigente. E igualmente inevitable es que las compañías vean este hecho como la excusa perfecta para reeditar contenidos y reciclar obras que les puedan proporcionar un margen de beneficios claro.
Aquí surgiría la opinión discordante del distribuidor alegando con la posibilidad de ofrecer títulos exitosos a nuevas generaciones de jugadores o nuevas plataformas. Sinceramente no creo que este “target” abarque una cuota de mercado lo suficientemente amplia como para justificar la venta, más aún teniendo en cuenta la retrocompatibilidad de las máquinas actuales (sí, aun sigo teniendo mi PlayStation 3 de sesenta Gigas retrocompatible funcionando a tope), o del PC, que nos permitiría disfrutar de estos buenos títulos por un precio mucho más asequible que, el que en la mayor parte de los casos nos intentan “colar” las desarrolladoras. Más bien denota cierta falta de originalidad por parte de compañías que pretende explotar su gallina de los huevos de oro, antes de innovar con nuevas IP´s o entregas de sus franquicias.
Y es que aquí está la clave. No tiene mucho sentido, más allá del comercial, reeditar un juego de una generación a otra si entre éstas no hay un cambio paradigmático en cuanto al esquema gráfico y jugable que proponen. Los casos en los que el remake está justificado son aquellos en que la obra en sí sea imprescindible, y deba ser jugada por cualquier generación de videoadictos independientemente de su género; o en aquellos casos en los que el lavado de cara en cuanto a mecánicas, gráficos, contenido y experiencia en general, sea lo suficientemente destacable como para justificar su adquisición, siendo el original un juego mayúsculo.