Título original: Last Chance Harvey
Título en Argentina: Tu última oportunidad
Director: Joel Hopkins
Guionista: Joel Hopkins
Intérpretes: Dustin Hoffman
Emma Thompson
Eileen Atkins
Kathy Baker
Liane Balaban
James Brolin
Productores: Tim Perell
Nicola Usborne
Fotografía: John de Borman
Música: Dickon Hinchliffe
Montaje: Robin Sales
Nacionalidad: Estados Unidos
Año: 2.008
Duración: 92 minutos
Edad: Todos los públicos
Género: Drama romántico
Distribuidora: Universal Pictures International Spain, S. L.
Estreno: 08-05-2.009
Página WEB: Web Oficial de la película en España
Web Oficial de la distribuidora en España
Tráiler de la película en You Tube
Calificación:
Crítica: 6,593 Espectadores: 285.073
Vizcaya: 6,472 Recaudación: 1.606.092,06 €
España: Puntos (Popularidad): 0
Rugoleor: Índice de popularidad: 0
Sinopsis:
Harvey es un hombre aburrido y cansado que viaja a Londres para asistir a la boda de su hija. Allí, Harvey conoce a Kate, una mujer muy peculiar que cambiará su vida para siempre.
Crítica:
13.05.2009 – JOSU EGUREN
Romance otoñal
“Nunca es tarde para enamorarse” es un modesto dramilla romántico interpretado en clave otoñal, que vive por y para dos actores cuyo generoso esfuerzo rescata parte de la película de lo mediocre. Recuperando registros emocionales muy próximos a los vividos en cintas como “Los puentes de Madison” o “Antes del amanecer”, Joel Hopkins fuerza el encuentro entre Dustin Hoffman y Emma Thompson, en una ciudad de Londres que es la Tokyo de Bill Murray para el septuagenario galán.
Es una obviedad que el cine envejece prematuramente a la mujer, y por eso nos toca digerir el romance entre la estupenda Emma Thompson y un hombre veinte años mayor que ella. Kate es una mujer atrapada en las redes de su posesiva madre (muy al estilo de Tallulah Bankhead), y Harvey un hombre fracasado sin una familia a la que aferrarse. Y así, sin más misterios, el guión nos anuncia desde el principio su desenlace, fiándose en el oficio de una pareja de actores que no parecen los más indicados para provocar una reacción química improbable. Pero aún así, y sabiendo que la película podría terminar del mismo modo en el minuto uno que en el noventa, se puede llegar a disfrutar con unas interpretaciones plagadas de matices en las que ambos salen victoriosos, pese a que el guión nos escamotea lo que podría haber sido una buena y necesaria ración de diálogos adultos, amparándose en cincuenta mil elipsis.
Los espectadores que ya hemos visto “En el séptimo cielo” sabemos que, pasados los cincuenta, es posible unir los corazones con lazos más lujuriosos que los de la delicada ternura, pero esto es Hollywood, y a todo lo que pueden aspirar un hombre y una mujer veteranos es a compartir una bonita habitación con camas separadas y a un fugaz beso en la mejilla. “Nunca es tarde para enamorarse” es un simple y amable retrato de los amores tardíos calculado para provocar los ventrículos de los espectadores maduros.