El mismo día de su muerte, el 1° de julio de 1974, Perón tuvo la sensación de que perdía el conocimiento. La enfermera, Norma Baylon (también del Hospital Italiano), lo escuchó decir: "Esto se acabó"
La salud del General Perón en el año 1974 se veía seriamente comprometida con motivo del viaje que hiciera al Paraguay, siendo la causa del traslado los desacuerdos existentes en las negociaciones sobre la construcción de una presa hidroeléctrica que era de vital importancia para la Argentina. Si bien es cierto que sus doctores se oponían a la idea de una visita al Paraguay, Perón decidió hacerla. El entonces Presidente Stroeesner insistió que su arribo fuera en barco, así una gran multitud podría esperarlo en el puerto y darle la bienvenida. El 6 de junio Perón viaja por vía aérea hasta un puerto fluvial del norte argentino, subiendo a bordo de un barreminas que lo llevaría hasta la capital guaraní. Durante el viaje caía una fuerte llovizna y en su llegada apoteótica, a un costado, se encontraba la cañonera “Asunción” que en 1955 lo trajera al Paraguay. A su paso, lo saludo con una salva de veintiún cañonazos.
Ya en tierra el General Perón de píe, malamente protegido por un toldo, pasó revista a las tropas del ejército paraguayo del que había sido designado general honorario y recibido con unción el collar “Francisco Solano López” con el que fue condecorado. Y a pesar de su breve estada, regreso muy fatigado. En Argentina los problemas con la subversión lo lastimaban dolorosamente y se sentía entrampado en medio de un conflicto – que no deseaba – y se quejaba amargamente, al punto de llegar a amenazar en”Tomar un avión y regresar a Madrid”. A los pocos días de la llegada de su viaje, Perón se entrevistó con Ricardo Balbín – líder de la oposición – en la Casa Rosada, luego el político radical contaría que lo había encontrado a Perón agotado, tanto física como espiritualmente, llegando a confesarle en un momento de la charla ”Me muero”.
Concluyendo acerca del momento justo en que Perón comprendió que se acercaba el fin, el Dr. Seara aventura: "Yo creo que desde el sábado en el que lo sacamos del edema agudo de pulmón se dio cuenta de que se terminaba todo". Fuente diario La Nacion “Los últimos días del General”