Oatcakes o galletas de avena para acompañar quesos. Receta

Por Recetasdetiaalia

Los británicos son grandes amantes del queso y no hay comida de celebración que no se corone con un buen surtido acompañado de todo tipo de galletas saladas. A mi, que me enloquece el queso de una manera preocupante, me encanta visitar a mi familia y siempre me reservo para ese momento porque el disfrute está garantizado. Los oatcakes o galletas de avena nunca falta en el repertorio y son mis preferidas.
De origen escocés, los oatcakes o galletas de avena tienen una textura crujiente pero delicada y un sabor ligeramente dulce que las hace irresistibles. Son perfectas para acompañar cualquier tipo de queso, aunque también se pueden servir con salmón ahumado, fiambres, etc y montar con ellas canapés varios. Son muy sencillas de preparar y muy económicas, así que no hay excusa para no ponerse con ellas ya mismo.
¡Vamos con la receta!

Ingredientes


225 g de salvado de avena, 60 g de harina de trigo, 1/2 cucharadita de bicarbonato de soda, 60 g de mantequilla, 1 cucharadita de sal, 1/2 cucharadita de azúcar y 60-80 ml de agua caliente.

Elaboración


En un recipiente hondo mezclamos los ingredientes secos, es decir, el salvado de avena con la harina de trigo, el bicarbonato de soda, la sal y el azúcar. Cortamos la mantequilla en dados o la pasamos por un rallador y la agregamos a los ingredientes secos, mezclamos con los dedos hasta incorporar y obtener lo que parecen migas de pan.
A continuación, agregamos el agua caliente, poco a poco, y mezclamos durante el proceso. No conviene usar todo el agua de golpe, pues la cantidad exacta nos la marcará el tipo de avena que usemos. Buscamos conseguir una masa espesa que no se pegue a los dedos, pero ligeramente hidratada.
Espolvoreamos la superficie de trabajo con un poco de harina y salvado de avena y estiramos la masa con un rodillo. Tiene que quedar muy fina, como de medio centímetro de grosor. Cortamos con un cortapastas redondo, un vaso o lo que tengamos a mano y transferimos las galletas a una bandeja de horno cubierta con papel sulfurizado.
Cocemos en horno pre-calentado a 180 ºC, con calor arriba y abajo, durante 20-30 minutos o hasta que los extremos de nuestras oatcakes o galleras de avena se vuelven ligeramente dorados. Retiramos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla metálica antes de consumir o guardar.

Degustación


Como ya he comentado en la introducción, las oatcakes o galletas de avena son perfectas para acompañar una tabla de quesos o montar con ellas canapés variados. Las podemos hacer del tamaño que más nos gusten y jugar con ello a la hora de la presentación. Su textura crujiente por fuera y mantecosa por dentro es extraordinaria y adictiva. Una vez catadas, vais a querer más.