La recaudación del juego irá a la “Obama Victory Fund”, una cuenta destinada a la campaña de Barack Obama para la reelección como presidente de Estados Unidos y que tiene como fin llegar a los 1.000 millones de dólares, de ahí se desprende la explicación del porqué los precios de las entradas sean elevados : 100 dólares la más barata y los 5.000 la más cara.
Ante la sequía de juegos de la NBA, por lo menos el primer mandatario estadounidense ha logrado acercar el espectáculo a los fans que tanto lo añoran.