Obama no difundirá las fotos del cadáver de Bin Laden

El presidente Barack Obama pasará a la historia como el que dio caza al peor enemigo de Estados Unidos. Pero, una vez concluida la operación y antes de la gloria, a Obama le espera el escrutinio de los políticos, la opinión pública y los medios de comunicación de Estados Unidos. Uno de los grandes debates que ahora mismo está fuera de control es la publicación de las fotos del cadáver de Osama Bin Laden. Las imágenes, que le hicieron los comandos SEAL después de dispararle en la cara y en el pecho, siguen bajo la más estricta custodia de las autoridades norteamericanas, que dudan sobre la conveniencia de darlas a conocer a la opinión pública.La propia división en el seno del equipo presidencial ha traspasado los muros de la Casa Blanca y ha llegado hasta el Congreso y los medios de comunicación. El martes, el todavía director de la CIA, Leon Panetta, dio a entender que las imágenes del cadáver de Bin Laden se iban a sacar a la luz en contra de la postura del jefe del Pentágono, Robert Gates, y de la secretaria de Estado, Hillary Clinton.
Sin embargo, Obama decidió ayer que estas imágenes del cadáver permanecerán clasificadas, según dijo en una entrevista que concedió en exclusiva al espacio de investigación «60 Minutes» de la cadena televisiva CBS. Clinton y Gates temen que la publicación de las imágenes sólo sirva para alimentar la venganza de los yihadistas contra Estados Unidos.
El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, leyó a los periodistas la transcripción de las respuestas del presidente, que se hizo ayer a primera hora de la tarde. Preguntado por si había visto las controvertidas imágenes, el presidente contestó que «sí». También, añadió que «(puedo confirmar que) era él».