Sin embargo, Obama decidió ayer que estas imágenes del cadáver permanecerán clasificadas, según dijo en una entrevista que concedió en exclusiva al espacio de investigación «60 Minutes» de la cadena televisiva CBS. Clinton y Gates temen que la publicación de las imágenes sólo sirva para alimentar la venganza de los yihadistas contra Estados Unidos.
El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, leyó a los periodistas la transcripción de las respuestas del presidente, que se hizo ayer a primera hora de la tarde. Preguntado por si había visto las controvertidas imágenes, el presidente contestó que «sí». También, añadió que «(puedo confirmar que) era él».