La orden fue emitida en abril pasado por la jueza Phillis J. Hamilton para lograr mayor transparencia en las actividades en ese centro, denominado actualmente Instituto de Cooperación y Seguridad del Hemisferio Occidental, con sede en Fort Benning, Georgia.
Según el fundador de la organización pro derechos humanos SOA Watch, Roy Bourgeois, el Pentágono sabe que la entrega de esos nombres revelaría las atrocidades que se cometen en dicha institución, y por eso trata a toda costa de mantener esa información en secreto.
La decisión de apelar y no aceptar el fallo de la jueza Hamilton desenmascara el discurso de Obama de que su gobierno sería el más transparente de la historia, añade Bourgeois.
El caso irá a la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito en el estado de California, donde los integrantes de SOA Watch argumentarán sobre el valor de la transparencia y el derecho del público a conocer los listados de los soldados que reciben entrenamiento del Ejército estadounidense.
La Escuela de las Américas fue el centro de un escándalo en 1996, cuando el Pentágono publicó manuales de campaña de esa academia castrense que recomendaban a los soldados aplicar la tortura, la extorsión y la ejecución.
Cientos de sus alumnos han estado implicados en violaciones de los derechos humanos y en la formación de escuadrones de la muerte.
Entre los más connotados están los dictadores Jorge Videla de Argentina, Hugo Banzer de Bolivia y el general Ríos Montt de Guatemala.
De acuerdo con la declaración de SOA Watch, varios graduados de dicha institución lideraron el golpe de Estado de 2002 en Venezuela, y el de 2009 en Honduras, mientras otros participan actualmente en actividades represivas en Colombia, Honduras, México y otros países.
SOA Watch llamó a realizar el 9 de agosto de 2013 ayunos y acciones con vista a conmemorar el aniversario 30 de la primera acción contra el entrenamiento de soldados latinoamericanos en territorio estadounidense. |PL